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Estación de resistencia en Laponia

Comunicado de prensa - abril 18, 2005
Inari, Laponia Ártica. Finlandia. Al final de la pasada semana, en Inari, Laponia finlandesa, tuvo lugar una rueda de prensa con los escritores que han viajado a las tierras de los Sámi, los pastores de renos.

Pastor de renos Sámi, cuyo estilo de vida está amenazado por las talas en bosques primarios de Finlandia

Marc, miembros de Greenpeace presentes en la Estación de Resistencia que estableció la organización a principios de marzo para defender los bosques de los Sámi, en Laponia Ártica. Finlandia

Pocos días atrás uno de los miembros de Greenpeace, presentes en la Estación de Resistencia que estableció la organización a principios de marzo para defender los bosques de los Sámi, recibió una llamada de teléfono móvil en la que un leñador finlandés, que no ocultó su identidad, lanzó la siguiente amenaza: "si no quitáis el campamento en 48 horas, alguien morirá. Yo y otras personas lo haremos...".

    Esta amenaza, que ha sido puesta en conocimiento de la policía finlandesa, lejos de amedrentar a los miembros de Greenpeace, ha servido para reafirmarnos en la idea de que nuestra presencia allí está produciendo incomodidad e inquietud entre los sectores madereros finlandeses que están atentando contra los últimos bosques primarios finlandeses (el 5% de la superficie forestal finlandesa). Greenpeace no abandonará la Estación de Resistencia de Laponia. Actualmente la representación española en ella consta de Miguel Ángel Soto, responsable de la campaña de Bosques, y el escritor Javier Moro, autor de libros como Era medianoche en Bhopal, Senderos de libertad y Las montañas de Buda, que regresarán a España en los próximos días, y Marc Sanjoán, activista catalán de Greenpeace que lleva varias semanas y aún permanecerá otras más en la Estación.

El escritor Javier Moro, hizo las siguientes declaraciones antes de partir a Finlandia:

Ser escritor es un trabajo duro. La competencia es feroz -por no decir algo peor- no sólo por el propio mercado editorial, sino por otros medios como la televisión, vídeos y DVDs, internet, etc. Y cuando consigues escribir un libro más o menos decente y llegar con él a más y más lectores cada día, cuando tienes un éxito en tus manos, aún tienes que enfrentarte a un regusto amargo después del último párrafo. No puedo seguir preguntándome cuánta pulpa de papel ha devorado mi libro, cuántos árboles han sido talados, cuánta destrucción ha causado en estos hábitats naturales mi modesto esfuerzo como escritor.

Por eso es importante este viaje al norte de Finlandia. Porque nos aporta a los escritores la información que necesitamos sobre las consecuencias últimas de nuestro trabajo que está siendo publicado. Necesitamos saber de dónde procede el papel de nuestros libros. Porque no queremos formar parte de la destrucción de los últimos bosques primarios del planeta, hogar de comunidades indígenas que cuidan su amplísima variedad de flora y fauna. La tecnología actual permite a los editores usar papel procedente de fibra reciclada o papel certificado con el sello FSC. Es nuestro deber como escritores evitar que nuestros libros sean cómplices en esta destrucción de la naturaleza.