La organización critica el cambio de la política de agua portuguesa que con la Alqueva apuesta por la contaminación y la especulación. Activistas de Greenpeace denunciaron hoy la operación especulativa que el ayuntamiento de El Granado está realizando en un espacio protegido de la ribera del Guadiana con la excusa de construir un puente ransfronterizo entre España y Portugal.
GREENPEACE/Pedro ARMESTRE
Descargar imagen en alta resolución
Greenpeace terminó hoy su campaña por el Guadiana con una jornada informativa en Ayamonte, el ayuntamiento que abandera la gran operación de especulación urbanística que amenaza el Bajo Guadiana. 35 voluntarios de la organización repartieron en la Plaza de La Laguna de esta localidad información sobre el estado del río, los problemas que acechan específicamente a Ayamonte y la importancia de conservar los ecosistemas fluviales. Dos voluntarios informan a la policía local.
Greenpeace terminó hoy su campaña por el Guadiana con una
jornada informativa en Ayamonte, el ayuntamiento que abandera la
gran operación de especulación urbanística que amenaza el Bajo
Guadiana. 35 voluntarios de la organización repartieron en la Plaza
de La Laguna de esta localidad información sobre el estado del río,
los problemas que acechan específicamente a Ayamonte y la
importancia de conservar los ecosistemas fluviales.
Greenpeace participó ayer en Vila Real de Santo Antonio
(Portugal) en un encuentro de colectivos ecologistas que trabajan
en las dos orillas del Bajo Guadiana. Las organizaciones Almargem,
Asociaçao para a Defensa do Patrimonio de Mértola (ADPM),
Ecologistas en Acción, Greenpeace y Pura Vida decidieron elaborar
una propuesta para crear un Parque Internacional en el Bajo
Guadiana que presentarán a sus respectivos Gobiernos en la próxima
cumbre hispano-lusa que se celebrará en Badajoz en noviembre.
COSTA ESURY, UN PROYECTO URBANÍSTICO SOBRE DOMINIO PÚBLICO
Ayamonte es la población que está empujando la importación del
modelo de complejo urbanístico con campos de golf y puertos
deportivos río arriba. Hasta doce campos de golf está previsto
construir en la ribera española del Guadiana, desde la
desembocadura hasta El Granado, donde se están realizando ya unas
obras ilegales sobre terrenos protegidos bajo la figura de Lugar de
Interés Comunitario, integrado en la Red Natura 2000, hábitat del
lince ibérico y del águila imperial y afectada por el Plan Especial
de Protección del Medio Físico.
El nuevo Plan General de Ordenación Urbana de Ayamonte ha dado
luz verde a 6 convenios urbanísticos para recalificar como
urbanizables más de cinco millones de metros cuadrados. Uno de los
mayores proyectos, Costa Esury, afecta directamente a la margen
fluvial del Guadiana. El promotor es Fadesa y ha inciado la
construcción de 6.300 viviendas, dos campos de golf y zonas
comerciales de ocio. La página web de la empresa menciona su
proyecto residencial como diseñado de acuerdo con la arquitectura
propia del mediterráneo: chalets adosados, apartamentos y viviendas
en "Pueblo Mediterráneo".
Actualmente las instalaciones dedicadas al golf están a menos de
20 metros de la orilla del Guadiana, sobre las marismas de la
desembocadura y en Dominio Marítimo Terrestre.
Las actividades especulativas de Fadesa a costa de la
destrucción del litoral afectan a varias Comunidades Autónomas.
Además, tiene abierto en Marbella un expediente urbanístico en
relación al caso del hotel Barceló Golf. Actualmente Fadesa
pretende extender sus malas prácticas a países como Portugal y
Marruecos. Sólo en Marruecos tiene proyectos en Marrakech, Kabila,
Tetuán, Tánger, Rabat, Agadir y Casablanca.
NO SE PUDIERON MONTAR LAS CARPAS PARA ACTIVIDADES EDUCATIVAS
Greenpeace se limitó a realizar una jornada informativa puesto
que el alcalde de Ayamonte, Rafael González, no permitió a los
voluntarios de la organización montar las tres carpas que la
organización ha instalado en todas las localidades en las que ha
recalado en su Descenso del Guadiana, que empezó el día 20 de
octubre en los Ojos del Guadiana y llegó ayer a Ayamonte, en la
desembocadura.
Las carpas que no se pudieron montar en Ayamonte tenían una
exposición de fotos antiguas y actuales del río Guadiana, gráficos
que explican el funcionamiento de un ecosistema fluvial y la
evolución del acuífero 23, en el que nace el río. Una de las carpas
estaba especialmente dedicada a los niños. En ella los más pequeños
podrían aprender a través de diversos juegos qué es un río, qué
fauna y qué flora pueden encontrar en él, la importancia de la
biodiversidad, los problemas de los ríos y las formas de
solucionarlos.