Comunicado de prensa - julio 16, 2008
La Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo en Bruselas, donde comparecía hoy Greenpeace, a través de su Presidente Sr. Libicki, ha reconocido la gravísima situación sanitaria y ambiental que vive la ciudad de Huelva por culpa de los vertidos tóxicos y radiactivos de Fertiberia y FMC-Foret y propone además la intervención del Tribunal Europeo de Justicia junto con la Comisión Europea (CE) para frenar esta catástrofe lo antes posible.
Un miembro de Greenpeace mide la radiactividad de los vertidos de fosfoyesos junto a la orilla del Río Tinto, en Huelva.
Los miembros de la Comisión han solicitado también, y a petición
de D. Hammerstein, W. Meyer y C. Iturgaiz con el apoyo del
Presidente de la Comisión, trasladar una comisión de investigación
a Huelva para conocer in situ el problema que vive la ciudad.
Por su parte, la CE ha notificado al Comité de Peticiones que no
ha recibido respuesta a la carta de emplazamiento enviado al
Gobierno de España, por lo tanto, considera que Fertiberia funciona
actualmente fuera de la Directiva IPPC, a pesar de tener otorgada
por la Junta de Andalucía la AAI (Autorización Ambiental
Integrada).
Por ello, en el plazo más corto posible enviará un dictamen
motivado endureciendo sus exigencias para atajar los vertidos a las
marismas del Tinto.
En el caso de los vertidos de Cesio-137, en el CRI Nº 9, se pide
al Comité EURATOM que visite el lugar. Además la Comisión de
peticiones enviará una carta a España para pedirle que ponga
solución inmediata al vertido de Cesio-137.
El presidente Libicki ha certificado hoy en Bruselas a los
miembros de Greenpeace que el problema sanitario y ambiental de
Huelva es muy importante y urgente y se debe solucionar lo antes
posible.