Comunicado de prensa - marzo 10, 2015
Los días 7 y 8 de marzo se celebró la asamblea anual del Consejo de Greenpeace España, en la que los representantes de los socios y socias aprobaron el balance de actividades de 2014. Además, se ha renovado un puesto de la Junta Directiva: el de Sonia Rubio, que tras cinco años en la presidencia de Greenpeace, es relevada por la consejera por Cataluña Sol Solà.
Durante el fin de semana, Madrid acogió un año más la asamblea ordinaria del Consejo de Greenpeace España, donde se trataron y debatieron las líneas estratégicas de la organización en el marco social , económico y político actual, especialmente en el contexto europeo y nacional, en el cual el papel activo de la ciudadanía será determinante a la hora de avanzar hacia un cambio de modelo económico basado en nuevos patrones productivos y de consumo, dado el carácter finito de los recursos naturales.
Se procedió también a la renovación de uno de los siete miembros de la Junta Directiva, que pasará a estar conformada por Sol Solà (presidenta), Luigi Ceccaroni (trustee y vicepresidente 1ª), Xabier Barón (vicepresidente 2ª), Pedro Senso (administrador general), Nacho Benítez, Oscar Cabrero y Daniel Fernández (vocales).
"Agradezco en nombre de toda la organización el excelente trabajo realizado por la presidenta saliente Sonia Rubio y la confianza que ahora se deposita en la nueva Junta. Nos comprometemos a continuar trabajando con la misma ilusión y rigor en 2015", afirmó Sol Solà, nueva presidenta de Greenpeace España.
También hay que destacar la actualización de los estatutos para conseguir un cuerpo legal más simplificado y acorde con la realidad de la organización.
El Consejo de Greenpeace valoró de forma positiva el buen trabajo desarrollado por la Asociación, en un año en el que se ha consolidado la estabilidad de la organización, consiguiendo superar la cifra de 100.000 socios.
Para este año las prioridades de la organización serán el cambio climático (COP de París) y el modelo energético (con especial atención a los proyectos de prospecciones y fracking), el medio ambiente en nuestro país en un contexto electoral, y el proyecto internacional para conseguir un santuario Ártico, icono de nuestra última frontera natural. Se continuará trabajando en las campañas contra la Ley Mordaza, por la protección de los bosques, los océanos y la agricultura sostenible.
Greenpeace es una organización independiente que no acepta dinero de gobiernos ni empresas para poder denunciar a todas aquellas personas o instituciones que amenazan al planeta. Solo el apoyo desinteresado de nuestros socios y socias hace posible nuestro trabajo.