Comunicado de prensa - diciembre 11, 2014
- La organización ecologista subraya que confía en la Justicia al finalizar la vista oral por una protesta pacífica contra la central nuclear valenciana.
- Greenpeace lamenta que la Ley de Seguridad Ciudadana que se aprobará hoy criminalice a futuros activistas pacíficos como los 17 de Cofrentes.
A las 13:45 horas ha concluido la vista oral del juicio a los 17 de Cofrentes, celebrado desde el 4 de diciembre en el Juzgado Penal nº 11 de Valencia. Durante los días 4, 5, 9, 10 y 11 de este mes declararon primero los 16 activistas y un fotoperiodista independiente, Pedro Armestre, encausados. Asimismo testificaron cinco guardias de seguridad, el jefe de seguridad de la central nuclear de Cofrentes, los dos directores de la planta, siete guardias civiles, un médico forense y una experta internacional en energía nuclear.
“Salimos del juicio muy tranquilos, totalmente confiados en que se va a hacer justicia. Denunciábamos de forma pacífica entonces y denunciamos ahora el peligro de la energía nuclear. Es un deber ciudadano defender el medio ambiente, especialmente pensando en las futuras generaciones”, ha declarado Mario Rodríguez, director ejecutivo de Greenpeace España
Los 16 activistas y el fotoperiodista independiente se enfrentan a posibles penas de casi tres años de cárcel por un acto pacífico del 15 de febrero de 2011 en el que se pintó “PELIGRO NUCLEAR” sobre una torre de refrigeración de la central de Cofrentes. Greenpeace, como organización ecologista y pacifista, muestra su preocupación por lo que la Ley Orgánica sobre Protección de la Seguridad Ciudadana que previsiblemente se aprobará hoy, supondrá en un futuro para activistas pacíficos como los 17 de Cofrentes, pues quedarán sin el derecho a una tutela judicial efectiva.
“Mientras acaba el juicio en Valencia, es probable que esta tarde el Parlamento apruebe una Ley de Seguridad Ciudadana que trata de amordazar el derecho a la protesta pacífica. Por multas millonarias que nos pongan o amenazas de penas de cárcel, seguiremos denunciando a quienes cometen tropelías medioambientales y a quienes las permiten”, ha añadido Rodríguez.
Durante todos los días del juicio en Valencia el barco de Greenpeace Arctic Sunrise, símbolo del activismo pacífico, ha estado en Valencia para apoyar a los 17. Ha recibido la visita de más de 4.200 personas interesadas en conocer mejor a la organización y a los encausados. Más de 170 organizaciones y personalidades, además de miles de gestos con el 17 en la mano a través de las redes sociales han demostrado el apoyo público a los activistas y el fotoperiodista independiente de Cofrentes y a Greenpeace.
“Queremos agradecer el inmenso apoyo social recibido antes y durante el juicio, ya que nos da fuerza para seguir luchando por un mundo más verde y en paz”, ha concluido Rodríguez.
Greenpeace es una organización independiente que no acepta dinero de gobiernos ni empresas para poder denunciar a todas aquellas personas o instituciones que amenazan al planeta. Solo el apoyo desinteresado de nuestros socios y socias hace posible nuestro trabajo.