Comunicado de prensa - febrero 11, 2008
El buque 'New Flame' no soportó el temporal que azotó el Estrecho el pasado domingo y ha vuelto a verter fuel en las costas de Algeciras. Las manchas de chapapote del chatarrero, que encalló en agosto, contaminan ya las playas cercanas, como El Rinconcillo, Getares y la Concha.
El buque New Flame, que encalló en Gibraltar el 12 de agosto de 2007, con 27.000 toneladas de chatarra.
Se han conseguido limpiar 500 metros de costa en las últimas 24
horas, aunque no hay datos oficiales de la cantidad de hidrocarburo
retirado.
La organización ecologista, pide al ejecutivo que afronte su
responsabilidad de impedir la contaminación derivada del
hundimiento del New Flame. "El nuevo vertido del New Flame vuelve a poner de manifiesto la peligrosidad del bunkering y la irresponsabilidad de las autoridades gibraltareñas",
-señala Juan López de Uralde, director de Greenpeace España. "Cada día se producen en la bahía de Algeciras unos 200 transbordos de productos petrolíferos con vertidos, derramesy accidentes continuos”,
-añade.
“El del New Flame es el último episodio del abandono de responsabilidades y vuelve a poner en evidencia que en la bahía de Algeciras se asienta una bomba de relojería"-
concluye Juan López de Uralde.