Comunicado de prensa - febrero 21, 2009
El anuncio que Manuel Chaves hizo ayer relativo a la creación de una comisión de expertos para recuperar las balsas de fosfoyesos de Huelva, donde vierte la empresa Fertiberia, ha sido acogido por Greenpeace con satisfacción, que considera que su presencia en ese grupo de expertos es necesaria.
Expertos de Greenpeace realizan mediciones de niveles de radioactividad en las balsas de Fosfoyesos en Huelva.
Esta medida, junto con el cese inmediato de los vertidos a las
marismas del río Tinto, fue una de las demandas planteadas al
presidente autonómico en la última reunión que la organización
ecologista mantuvo con él.
Greenpeace siempre ha mantenido que las tareas de
descontaminación de las balsas de fosfoyesos permitiría la creación
de nuevos empleos, lo que posibilitaría la reubicación de los
trabajadores afectados por el cese de la actividad de
Fertiberia.
"Éste es un buen comienzo, pero Fertiberia debe cumplir la
resolución de la Dirección General de Costas y la reciente
sentencia del Tribunal Supremo; el Ministerio de Medio Ambiente y
la Junta seguirán siendo cómplices de la catástrofe sanitaria y
ambiental hasta que no obliguen a la empresa parar los vertidos",
ha declarado Julio Barea, responsable de la campaña de
Contaminación de Greenpeace.
Huelva vive cercada por 120 millones de toneladas de fosfoyesos,
residuos tóxicos y radiactivos procedentes de la fabricación de
fertilizantes químicos. Estudios científicos, como los de la
Universidad Pompeu Fabra o el Instituto de Salud Carlos III y el
Centro Nacional de Epidemiología, marcan a Huelva como el punto de
España con mayor grado de mortalidad por cáncer como consecuencia
de la intensa actividad industrial.