Un niño chino se sienta entre un montón de cables y residuos electrónicos. Los niños pueden ser encontrados a menudo desmantelando este tipo de residuos. Éstos contienen muchas sustancias químicas tóxicas que pueden ser muy perjudiciales para la salud de niños y niñas.
Los grandes nombres del sector electrónico han sido sometidos
al examen de Greenpeace sobre políticas de químicos y de residuos
electrónicos. La organización ecologista ha elaborado una
clasificación que pone de relieve las empresas que están trabajando
para asegurar que las sustancias químicas desaparezcan de sus
productos y las que tienen un buen programa de reciclaje de los
residuos que generan sus productos al final de su vida útil.
La importancia de este ranking radica en el grave problema
ambiental y de salud que está provocando la creciente generación de
residuos electrónicos que acaban en muchos casos en vertederos o
quemados a cielo abierto en los países empobrecidos. Reduciendo las
sustancias tóxicas que contienen los productos electrónicos se
reduce la contaminación que generan al convertirse en residuos y
facilitan su reciclaje y reutilización. Las empresas que han
establecido buenos esquemas de reciclaje aseguran que sus productos
no acaben en vertederos de países pobres como, por ejemplo, de
Asia.
"El ranking es una herramienta que ayudará a las grandes
empresas a mejorar su comportamiento ambiental. Las empresas
recibirán puntos por establecer sistemas de recogida de sus
productos desechados a nivel global, por eliminar sustancias
peligrosas en su producción, ya que es la única forma de asegurar
una reutilización y un reciclaje seguros", ha declarado Sara del
Río, responsable de la campaña de Tóxicos de Greenpeace.
De hecho, Greenpeace lleva meses trabajando con las empresas del
ranking para que mejoren sus políticas de protección ambiental.
Actualmente las mejor clasificadas son Lenovo, Nokia,
Sony-Ericcson, Dell y Samsung. La peor situada en el ranking es
Apple. Greenpeace considera que una empresa como ésta, líder en
diseño, debe llegar a ser líder en la protección del medio
ambiente. Por eso, Greenpeace, saca a la luz la web Green My Apple para que
sean los propios usuarios de esta empresa los que pidan que
encabece el ranking gracias a un cambio en sus políticas
ambientales.
Las principales empresas de productos electrónicos tienen la
oportunidad de mejorar sus políticas de residuos y sustancias
químicas y ascender en el ranking, ya que Greenpeace actualiza la
información cada tres meses. Sin embargo, se restarán puntos a las
empresas si se descubre que están mintiendo sobre sus políticas, si
practican dobles estándares o si se demuestra otra mala conducta
corporativa.
Los aparatos electrónicos son una mezcla compleja de varios
cientos de materiales, muchos de los cuales contienen metales
pesados, como plomo, mercurio, cadmio y berilio, y algunos
materiales y sustancias químicas peligrosas, como los retardantes
de llama bromados y el PVC. Estas sustancias peligrosas producen
una contaminación seria, que implica para los trabajadores un
riesgo de exposición al fabricar o descartar los productos.
Otro gran problema ambiental es el que generan los residuos
electrónicos. Greenpeace demanda que las empresas se
responsabilicen de la recogida y reciclaje de sus propios productos
al final de su vida útil, y no sólo en aquellos lugares dónde
existe una legislación que se lo exige. Este es el caso de la UE y
su Directiva de Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos
(RAEE)
Informes Ranking Verde de Electrónicos:
-
Informe completo Ranking Verde de Electrónicos
-
Resumen del Ranking
-
Criterios de puntuación del Ranking verde de electrónicos
- La página especial en la web de Greenpeace.-
Electrónicos: alta tecnología tóxica