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Greenpeace insta al Gobierno a que España deje de ser un ejemplo de ineficiencia energética

La demanda sigue creciendo en España de forma irracional ante la práctica inexistencia de medidas de ahorro y eficiencia energética

Comunicado de prensa - enero 26, 2005
El nuevo récord de consumo energético registrado ayer martes por la tarde a causa de las inclemencias meteorológicas, pone otra vez de relieve que España es un ejemplo mundial de ineficiencia y despilfarro energético. Greenpeace insta al Gobierno a emprender acciones serias, de forma decidida y urgente, para revertir esta situación que provoca graves daños medioambientales, además de una menor competitividad de España con respecto a los países de nuestro entorno.

La demanda sigue creciendo en España de forma irracional ante la práctica inexistencia de medidas de ahorro y eficiencia energética

Esta afirmación se confirma, una vez más, con los datos recientemente publicados del Ministerio de Medio Ambiente, procedentes del informe "Perfil Ambiental de España 2004", de acuerdo con los cuales en España la Intensidad de Energía Primaria (el cociente entre el consumo de energía primaria y el Producto Interior Bruto, PIB) en el período 1995-2000 tuvo una tasa de crecimiento medio anual del 0,5%, mientras que la Unión Europea (UE-15) tuvo en ese periodo una reducción del 1,3%.

Es decir, para producir una misma unidad de PIB, España ha tenido que gastar cada vez más energía mientras que la Europa de los Quince, en su conjunto (a pesar del mal dato de España), ha logrado gastar menos energía para producir esa misma unidad de PIB.

"¿Cómo quiere el Gobierno cumplir con sus promesas de incrementar la competitividad y reducir la contaminación de origen energético si cada vez somos más ineficientes y despilfarramos más?" -ha declarado Juan López de Uralde, Director Ejecutivo de Greenpeace.

Greenpeace considera que el crecimiento de la demanda eléctrica en España es irracional, como demuestra el disparatado aumento registrado en el mes de enero, que se sitúa en torno a un 10%. Así mismo Greenpeace opina que el Ministerio de Industria no está haciendo nada para racionalizar el consumo y contener nuestra progresiva deriva hacia mayores cotas de ineficiencia energética.

En ese sentido, Greenpeace denuncia que del total de ingresos previstos en España en el año 2005 a través de la tarifa eléctrica (17.290 millones de euros) tan sólo la exigua cantidad de 10 millones se destinarán a programas de gestión de la demanda.

"El Ministerio de Industria desprecia el gigantesco potencial de ahorro y eficiencia energética que tiene España. Montilla comete un error al considerar que las políticas de gestión de la demanda orientadas al ahorro y la eficiencia deben seguir siendo marginales en España, como en todos estos últimos años de gobierno del Partido Popular" -ha declarado Carlos Bravo, responsable de la campaña de energía nuclear de Greenpeace.

En general, y en España en particular, el aumento en el consumo de energía no es un índice de mayor desarrollo, sino de peor utilización del recurso, ya que cada vez somos menos eficientes en el uso de la energía

Greenpeace considera que el constante aumento en el consumo de energía eléctrica, tiene como consecuencia un aumento de los impactos sobre el medio ambiente de la generación de energía, en forma de emisiones de gases de efecto invernadero o residuos radiactivos.

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