Comunicado de prensa - mayo 16, 2006
El Ministerio de Industria ha limitado el desarrollo de los proyectos de energía eólica argumentando la incapacidad del sistema eléctrico de absorber las solicitudes para poner en marcha nuevos parques eólicos. Greenpeace reclama la mejora inmediata del sistema eléctrico para compatibilizar el desarrollo de las energías renovables con el sistema y no al contrario, además de revisar al alza los objetivos del Plan de Fomento de las Energías Renovables, que deberían ser acordes con su potencial.
España es el más alejado de los países firmantes en cumplir con el Protocolo Kioto.
La capacidad de generación de electricidad con energía eólica
terrestre es tan grande que podría generar más de ocho veces toda
la demanda eléctrica peninsular proyectada en 2050, según el
estudio "Renovables 2050: un informe sobre el potencial de las
energías renovables en la España peninsular"[1], presentado por
Greenpeace.
"El Ministerio de Industria no puede imponer el desarrollo
insostenible, por su incapacidad para incorporar las energías
renovables al sistema eléctrico" ha declarado Raquel Montón,
responsable de la campaña de Energía y Cambio Climático de
Greenpeace. "La obligación de cumplir con Kioto es de todos y
especialmente del Ministerio que dirige".
Según Greenpeace los objetivos del Plan de Fomento de la
Energías Renovables para 2010, son insuficientes para que España
pueda cumplir Kioto. Fue el Ministerio de Industria el responsable
de echar el freno a un mayor crecimiento de las renovables para no
contrariar a los intereses de las grandes eléctricas, más
interesadas en la masiva puesta en marcha de centrales térmicas y
en evitar el cierre de las nucleares. Este recorte impuesto por el
Ministerio es una buena prueba de ello.
Según los datos presentados ayer en Bruselas sobre las emisiones
de dióxido de carbono (CO2) se evidencia la permisividad con las
industrias para emitir tanto CO2 como ellas quieren, en este
contexto destaca la actitud de Industria que obstaculiza el
desarrollo de las energías renovables, bloqueando las auténticas
soluciones para combatir el cambio climático y la dependencia
energética.
España tiene compromisos legales de reducción de nuestras
emisiones, tales como no sobrepasar el 15% de estas sobre los
niveles de 1990, y en la actualidad está próxima al 50%. "Por
coherencia, por respeto social, por obligaciones legales de
carácter internacional, y por un compromiso con el Partido
Socialista que aboga por la lucha contra el cambio climático, el
Ministerio de Industria debe cambiar su política ", declaró
Montón.