Hoy, el Primer Ministro canadiense Justin Trudeau y el Presidente Barack Obama han establecido un precedente histórico en la protección de las aguas árticas. Cualquier actividad comercial en las regiones árticas de estos países tendrá que estar en línea con los objetivos climáticos internacionales y estará sujeta a un “test climático”. Esto incluye los proyectos de exploración y perforación de combustibles fósiles.



Aunque Obama y Trudeau no mencionan específicamente a las compañías petroleras, si juntamos ambas cosas, objetivos climáticos globales y las perforaciones en el mar, vemos que no serán compatibles según este anuncio. De hecho, ya lo había apuntado la comunidad científica al indicar que para que la temperatura media del planeta no suba más de 2ºC, las reservas energéticas del Ártico deben permanecer bajo su lecho marino.

El acuerdo de hoy muestra que las políticas de EE.UU. y Canadá empiezan a cuadrar con el objetivo de 1,5ºC que los líderes mundiales acordaron en París. Están estableciendo un fuerte precedente de que los compromisos globales sobre el clima deben estar en el centro de todas las decisiones sobre el desarrollo energético.

En unos días, Obama deberá presentar su plan para conceder licencias de perforación en alta mar para 2017-2022. El océano Ártico no debería aparecer, según este anuncio, como zona autorizada para perforar.

Esta noticia sucede tan solo una semana después de que el Comité de Biodiversidad de OSPAR (el convenio regional para proteger el medio marino del Atlántico Nordeste) concluyera que hay evidencia científica suficiente para afirmar que es necesario adoptar medidas de protección para las aguas internacionales del Ártico. En otras palabras, ya hay una puerta abierta para que muy pronto se acuerde la designación de un área marina protegida en el Alto Ártico.

El Ártico necesita protección. Hoy podemos decir que desde ambos lados del Atlántico tenemos señales de que es posible y de que es necesario, si queremos proteger su biodiversidad, sus comunidades y si queremos frenar a las industrias que provocan el cambio climático y cumplir con los compromisos internacionales.

EE.UU y Canadá han dado un primer paso y ahora tienen que mostrar de forma efectiva que dejan el Ártico libre de petróleo. Y los países dentro de OSPAR, en junio de este año, deben dar el paso definitivo y comenzar el proceso para crear un área marina protegida.

¿Qué puedes hacer tú?

- ¡Firma la petición por el Ártico! La de hoy ha sido una importante victoria, pero aún queda mucho camino para lograr proteger todo el Ártico. ¡Necesitamos tu apoyo!