Comunicado de prensa - octubre 19, 2017
• La organización ecologista también ha demandando la actualización del caducado Plan General de Residuos Radiactivos
Greenpeace ha comparecido esta tarde ante la Comisión de Energía del Congreso de los Diputados en la Ponencia encargada de las relaciones con Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) donde ha pedido al Gobierno el cese del presidente del CSN, Fernando Marti, que fue reprobado por el Congreso de los Diputados el pasado mes de julio, y se sustituya la vacante dejada por la consejera Cristina Narbona, que lleva cuatro meses sin ser renovada.
Asimismo, la organización ecologista ha exigido que se aumente la protección de las instalaciones nucleares contra actos “maliciosos” en base a un informe elaborado por varios expertos en seguridad para Greenpeace Francia. que cuestiona la seguridad de las instalaciones nucleares de Francia y Bélgica al señalar su vulnerabilidad a los riesgos de los ataques externos. Estos expertos están particularmente preocupados por las piscinas usadas para almacenar combustibles nucleares usados.
Greenpeace ha puesto también en conocimiento de la Comisión de Energía que el CSN evalúa, basándose en el Plan General de Residuos Radiactivos “caducado”, la autorización de construcción del Almacén Temporal Centralizado (ATC), conocido como cementerio nuclear. Sin embargo, ese Plan solo contempla vida útil de centrales nucleares hasta los 40 años. Pero a la vez, como se demostró con Garoña, el CSN actúa para llevar el parque nuclear español hasta los 60 años de explotación comercial, en línea con la política energética del Gobierno.
Además, la organización ecologista ha pedido también que se vigile el cumplimieto por parte del CSN del Reglamento sobre instalaciones nucleares y radiactivas, en el sentido de asegurar las previsiones económicas y financieras para garantizar operación y desmantelamiento nuclear, teniendo en cuenta la declaración de pérdidas económicas por parte de los operadores.