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Más de 5.000 personas exigen a Montilla un etiquetado eléctrico uniforme y fiable

Comunicado de prensa - julio 13, 2005
Greenpeace demanda al Gobierno que obligue a las eléctricas a informar en las facturas, con un formato uniforme, sobre las fuentes de energía empleadas y su impacto ambiental, cumpliendo el mandato de la Ley de Productividad

Etiquetado eléctrico que quiere Greenpeace

Más de 5.000 ciudadanos se han sumado hasta ahora a las reivindicaciones de la campaña "QUEREMOS SABER... PARA PODER ELEGIR", exigiendo al Gobierno un etiquetado eléctrico uniforme y fiable que acabe con el "engaño verde" de las eléctricas.

Greenpeace ha hecho llegar hoy al Ministro de Industria, José Montilla, las firmas que  fueron recogidas por los ecologistas durante la visita a nuestro país del barco Arctic Sunrise, que se unen a las de todos aquellos que han estado enviando al Ministro mensajes de correo electrónico en apoyo de las mismas reivindicaciones. En total son más de 5.000 ciudadanos que, hartos de "engaños verdes", exigen recibir la información fiable que necesitan sobre el impacto ambiental para ejercer su derecho a elegir las fuentes de energía de la electricidad que compran.

La demanda ciudadana de transparencia en cuanto al origen e impacto ambiental de la electricidad, a través de un etiquetado eléctrico uniforme, se une al mandato unánime del Congreso de los Diputados, que ha aprobado una ley (de impulso a la productividad) que incluye el etiquetado eléctrico. La ley aprobada obliga al Gobierno a velar para que todas las compañías eléctricas tengan que acompañar las facturas de una etiqueta, con un diseño uniforme y oficial, que indique con claridad el origen de la electricidad vendida al consumidor y el impacto ambiental producido en su generación.

"El Gobierno tiene ante sí un mandato legal que cumplir y una ciudadanía a la que escuchar, y todos pidiéndole lo mismo: un etiquetado eléctrico estándar"  -ha declarado José Luis García Ortega, responsable de proyectos de la Campaña de Energía de Greenpeace España-. "Es el Ministerio de Industria quien tiene que decirle a las eléctricas qué información deben añadir a las facturas de la luz y cómo presentarla".

Por otro lado, la Comisión Europea ha decidido llevar a España ante el Tribunal de Justicia de las Comunidades Europeas por no haber traspuesto la Directiva 2003/54/CE, que es la que introduce el etiquetado eléctrico. El Ministerio estaba preparando un borrador de Real Decreto con la intención explícita de dar cumplimiento al mandato de la Directiva relativo al etiquetado eléctrico. Sin embargo, como quedó señalado en las observaciones remitidas por Greenpeace durante el paso del borrador por el Consejo Consultivo de Electricidad, la propuesta del Gobierno no ha tenido en cuenta las recomendaciones de la Comisión Europea para la correcta incorporación del etiquetado eléctrico en la legislación nacional, y por tanto, si no se modifica el decreto, España tendría que enfrentarse a una condena del Tribunal europeo.

"La Directiva europea y la ley española quieren asegurar que los consumidores reciban una información veraz sobre el origen de la electricidad y su impacto ambiental, que les permita comparar entre lo que les ofrecen las distintas compañías eléctricas"  -ha añadido José Luis García Ortega-. "Ahora Industria tiene un único camino: cumplir la ley, digan lo que digan las eléctricas".