Comunicado de prensa - marzo 13, 2009
Los científicos alertan de que las cantidades aprobadas por el Consejo de Europa supondrán el colapso de la especie en el mar Mediterráneo y el océano Atlántico
Atún rojo dentro de una jaula de transporte en Turquía. Junio 2006. Si no se toman medidas urgentes en la gestión del atún rojo en el Mediterráneo, esta especie puede sufrir el mismo destino que el bacalao: el colapso de la pesquería.
Greenpeace ha pedido formalmente al Consejo de la Unión Europea
(UE) que revise su decisión de establecer una cuota de captura de
12.000 toneladas de atún rojo (Thunnus thynnus) para este año en
los caladeros del mar Mediterráneo y el océano Atlántico.
La organización ecologista ha adoptado esta iniciativa como
consecuencia del desprecio mostrado por la UE a las advertencias de
los científicos sobre la gestión de los stocks de atún rojo, que
indican que las cuotas aprobadas para 2009 pueden causar el
agotamiento de la especie y provocar su extinción.
"El Consejo debe garantizar que los recursos naturales sean
utilizados de una manera prudente y racional y ejercer el principio
de precaución en la gestión de los recursos pesqueros. Con el
establecimiento de estas cuotas, Europa ha vuelto a fallar en dicha
gestión" ha afirmado Celia Ojeda, responsable de la campaña Océanos
de Greenpeace.
Además, Greenpeace demanda al Consejo que, mientras revisa esta
decisión, adopte las medidas cautelares necesarias para evitar el
colapso de la pesquería (como dicta la Regulación 1367/200 de UE
acerca del acceso a la justicia en la regulación de asuntos
ambientales).