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El Rainbow Warrior llega a Valencia para exigir medidas urgentes para un Mediterráneo amenazado de muerte

El buque insignia de Greenpeace recorrerá durante parte de julio aguas españolas para denunciar y sensibilizar sobre la situación de este mar

Comunicado de prensa - julio 5, 2007
El buque insignia de Greenpeace, Rainbow Warrior, llegará el 8 de julio a aguas españolas para presentar la campaña 'Recuperemos el Mediterráneo'. La campaña comenzará el día 9 en Valencia y recorrerá distintos puntos de nuestro litoral para alertar sobre la inminente necesidad de recuperar un mar amenazado de muerte.

El barco de Greenpeace, Rainbow Warrior, atracado en el puerto de Sagunto (Valencia).

El barco de Greenpeace, Rainbow Warrior, atracado en el puerto de Sagunto (Valencia).

El Rainbow Warrior navegará por el Mediterráneo español para denunciar los problemas que enfrenta este mar, sensibilizar e informar a los ciudadanos y exigir a los gobiernos medidas efectivas de protección.

"Venimos con el Rainbow Warrior a Valencia para pedir actuaciones urgentes y efectivas que permitan recuperar el Mediterráneo para la naturaleza y los ciudadanos", declara Juan López de Uralde, Director Ejecutivo de Greenpeace España.

Desde su creación, Greenpeace ha tenido entre sus objetivos prioritarios la protección de mares y océanos, con especial atención al Mediterráneo. Por ello, el Rainbow Warrior lleva más de un año recorriendo las aguas de Italia, Francia, Grecia, Libia, y diversos países de Oriente Medio. Antes de venir a nuestro país, el RW fue testigo del saqueo de la pesquería del atún rojo en el Mediterráneo libio, donde pudo documentar cómo flota comunitaria pescaba ilegalmente esta especie amenazada.

La última vez que el RW estuvo en Valencia fue hace cuatro años para denunciar la llegada a este puerto de madera ilegal procedente de la destrucción de los bosques tropicales africanos. En 2003, el buque insignia de la organización ecologista estuvo detenido 25 días en el Puerto de Valencia y se le impuso una multa de 300.000 euros. Finalmente tras una campaña de apoyo ciudadano, fue puesto en libertad y la multa reducida a 6.000 euros. En 2006 Greenpeace quedó exonerada del pago de esta multa.

Greenpeace está tratando que el Rainbow Warrior atraque en el Puerto de Valencia, pero por el momento las gestiones con los actuales gestores de la parte pública del puerto han resultado infructuosas.