Este sitio usa cookies. Si continúas navegando estás aceptando su utilización. Más información

Las cuotas de profundidad, un nuevo ejemplo de la falta de voluntad de la UE de proteger los océanos

Las cuotas superan las recomendaciones científicas y no reflejan los compromisos para la reforma de la Política Pesquera Común

Comunicado de prensa - noviembre 30, 2010
Los ministros de Pesca de la Unión Europea (UE) han establecido las cuotas de 2011 y 2012 para las especies de aguas profundas. Greenpeace recuerda que las cuotas aprobadas superan las recomendaciones científicas y que alejan a la UE de los compromisos establecidos para la futura reforma de la Política Pesquera Común (PPC) y demuestran el escaso interés europeo en evitar el colapso de las especies más vulnerables y en proteger la biodiversidad marina.

El Consejo Internacional para la Exploración del Mar (CIEM), que asesora a la UE sobre la situación de las poblaciones de peces ha advertido que el 100% de la captura de peces de aguas profundas gestionadas por la UE está fuera de límites biológicos de seguridad.

Además, la mayoría de estos peces serán capturados por grandes arrastreros de profundidad, un arte de pesca altamente destructivo e insostenible, que genera numerosas capturas accidentales. Estas redes producen un elevado impacto en hábitats frágiles, como los arrecifes de coral de agua fría.

Sin embargo, la UE ha decidido mantener los mismos niveles de capturas para especies como el besugo (Pagellus bogaraveo), la brótola de roca (Phycis blennoides), el sable negro (Aphanopus carbo) y el reloj anaranjado (Hoplostethus atlanticus). De este modo, se puede pescar estas siete especies con uno de los métodos más indiscriminados y destructivos.

Reino Unido, Suecia, Países Bajos y Alemania han expresado su preocupación sobre la necesidad de una mayor cautela y conservación de estas especies. Por el contrario, España, Portugal y Francia han optado por demandar un incremento de las cuotas y seguir esquilmando los océanos.

La pesca de arrastre de profundidad es altamente destructiva, destruye antiguos lechos de coral y captura especies frágiles y de lenta reproducción. Los océanos están en crisis, y a pesar de ello la UE sigue permitiendo estos métodos de pesca mientras que en la Comisión Europea se ha pedido una reforma fundamental de la Política Pesquera Común (PPC).

Greenpeace pide que la reforma de la PPC establezca objetivos de reducción de flota legalmente vinculantes que cambien la flota hacia una pesquería sostenible con el medio marino y socialmente aceptable; que las cuotas estén basadas en criterios científicos, incluida la introducción de un tope legal de las capturas totales; una mayor transparencia y trazabilidad y el establecimiento de una red de Reservas Marinas, como parte de una estrategia de ordenación pesquera.


Categorías