Comunicado de prensa - noviembre 19, 2009
Greenpeace aplaude la orden del ministro de Bosques de Indonesia, Zulkifli Hasan, de paralizar las operaciones forestales destructivas en los bosques de turbera de la península de Kampar, en Riau (Sumatra), hasta que se revisen los permisos y se evalúe el impacto de las actividades.
Un grupo de 50 activistas de Greenpeace de todo el mundo, incluidos dos españoles (Pablo Méndez de A Coruña y Jesús Rolle Fernández, de Madrid), participan hoy en una acción contra la deforestación en Indonesia, en vísperas de la visita que el presidente Barack Obama a la región, en un momento en el que Estados Unidos bloquea el progreso de las negociaciones climáticas de la ONU que culminan el próximo mes de diciembre en Copenhague.
La medida se ha producido después de la acción pacífica de
Greenpeace el pasado 12 de noviembre en una de las concesiones de
la empresa papelera APRIL en Kampar, donde se denunciaron las
actividades destructivas de dicha empresa en los bosques y turberas
de la zona para plantar otras especies destinadas a la producción
de pasta y papel.
"Greenpeace espera que se realice una revisión exhaustiva de
todos las concesiones existentes a empresas papeleras en la
península de Kampar. Los mayores implicados en la destrucción de
estas valiosas turberas son Asia Pulp & Paper (APP) y su
principal rival APRIL. Estas empresas controlan conjuntamente el
73% de la capacidad de producción de pasta de papel de Indonesia",
ha declarado Miguel Ángel Soto, responsable de la campaña de
Bosques y Clima de Greenpeace.
En vísperas de la Cumbre Climática de Naciones Unidas de
Copenhague, que se celebrará dentro de unas semanas, Greenpeace ha
instalado un Campamento de Defensores del Clima para llamar la
atención internacional sobre el papel que desempeña la
deforestación de bosques y turberas en el agravamiento del cambio
climático. Dicho campamento ha sido visitado por actrices como
Melanie Laurent y el embajador de Estados Unidos en Indonesia,
además de la estrella de rock indonesio Iwas Fals.
Sin embargo, otros invitados no han sido bienvenidos. Desde la
pasada semana, 13 activistas internacionales de Greenpeace han sido
deportados de Indonesia, a pesar de tener toda la documentación en
regla. Entre ellos se encontraban dos españoles, el madrileño Jesús
Roller Fernández y el coruñés Pablo Méndez López. Además, igual
suerte corrieron dos periodistas que pretendían visitar el
campamento. Todo ello, ha suscitado la condena y la crítica de
parlamentarios, sociedad civil y asociaciones nacionales e
internacionales.
Greenpeace demanda a la comunidad internacional el fin de la
deforestación en todo el mundo para 2020 como parte clave de los
acuerdos de la cumbre climática de diciembre. Además, Greenpeace
pide a las empresas papeleras que operan en Indonesia que detengan
la expansión de sus plantaciones en zonas forestales y de turberas,
en especial en la península de Kampar en la isla de Sumatra.
"El Presidente de Indonesia tiene una oportunidad histórica para
anticiparse a la próxima Cumbre Climática de Copenhague y ofrecer a
la comunidad internacional un gran compromiso. Debe parar la
deforestación desenfrenada que hace que Indonesia sea el tercer
país emisor de gases de efecto invernadero del mundo", ha concluido
Soto.