Comunicado de prensa - agosto 19, 2009
Activistas de Greenpeace han desplegado una pancarta con el mensaje “Climate fraud, funded by big oil” (Fraude climático financiado por las grandes petroleras) frente a las oficinas del Instituto del Petróleo Americano (API, en sus siglas en inglés) en Washington. Junto a la pancarta han colocado logos de Exxon Mobil, Shell, BP y Chevron, los gigantes del petróleo en Norteamérica.
Activistas de Greenpeace con la frase “climate fraud, funded by big oil” (fraude climático financiado por las grandes petroleras) frente a las oficinas del Instituto del Petróleo Americano (API, en sus siglas en inglés) en Washington (EE.UU).
El origen de la protesta se encuentra en los planes secretos de
estas empresas de utilizar personal contratado por ellos para que
se hagan pasar por ciudadanos preocupados por las medidas que el
gobierno de Obama pueda tomar para paliar el cambio climático.
Según la organización, con estas medidas las petroleras estarían
financiando una campaña basada en crear una falsa opinión pública
contraria a la lucha contra el cambio climático.
En un documento del API, filtrado a Greenpeace la semana pasada,
se anima a los directores ejecutivos de algunas de las mayores
empresas petroleras del mundo a "ordenar a los mandos de su empresa
que apoyen con fuerza la participación de sus empleados en esta
campaña". El Presidente del API, Jack Gerard, avisa en el documento
de lo "sensible" de su contenido argumentando que "no queremos que
nuestros críticos conozcan nuestra estrategia" (1).
Ese documento del API y la campaña están en contradicción
directa con el apoyo que varias de las empresas que lo integran
dieron a la legislación sobre reducción y comercio de emisiones
(cap and trade) en EEUU. Además, el API utilizaba estadísticas
económicas falseadas para respaldarlo.
"Las oscuras maniobras de las petroleras suponen una burla al
debate público sobre las acciones a emprender con respecto al
cambio climático. Necesitamos centrarnos en los límites que los
científicos han marcado y no a los acuerdos de mínimos que
pretenden las petroleras" ha afirmado Melanie Francis, responsable
de la campaña de Clima de Greenpeace Internacional. "Es necesaria
una reconversión para que los trabajadores de este sector vean las
nuevas oportunidades de empleo que ofrece una revolución energética
'verde' y no que la teman y se enfrenten a ella en estas campañas
de desinformación".
"Los directores ejecutivos y los presidentes de las empresas que
forman el API, como ExxonMobil, BP, Chevron y General Electric
entre otras, deben denunciar públicamente estos sucios trucos.
Deben hacer claramente patente al Gobierno su apoyo a las fuertes
medidas necesarias para frenar el cambio climático con la vista
puesta en la Cumbre de Copenhague sobre Cambio Climático que tendrá
lugar en el próximo mes de diciembre (2)" ha añadido Francis.
En lo que va de año la industria petrolera estadounidense, junto
con la del carbón y el gas, han empleado más de 82 millones de
dólares en realizar lobby corporativo contra la legislación sobre
cambio climático.
Notas:
(1) El documento completo está disponible en http://www.greenpeace.org/oilmemo
(2) Greenpeace ha lanzado hoy una ciberacción a los directores
ejecutivos de las grandes petroleras pidiéndoles que manifiesten
públicamente su distanciamiento con la campaña del API y se
comprometan junto con los países industrializados a reducir sus
emisiones un 40% para 2020 sobre los niveles de 1990. Asimismo,
Greenpeace está pidiendo a los gobiernos que se comprometan a
invertir 140 mil millones de dólares anuales en los países en
desarrollo para que se adapten a los primeros efectos del cambio
climático, se comprometan para luchar contra él y paren la
deforestación. http://www.ciberactuacongreenpeace.es