Son las 4:55 h en España y las 12:55 en Bali. En el Plenario de la Cumbre de Cambio Climático tiene la palabra Mr Yongyuth Yutthavong, Ministro de los Recursos Naturales y Medio ambiente de Tailandia (Sudeste asiático). Desde ayer hasta mañana intervendrán ante este Plenario los gobiernos de todos los países de Naciones Unidas.
El señor Yutthavong, tras felicitar al IPCC y a Al Gore por su Nobel y dar las condolencias por los atentados en Argelia, explica que no se necesitan ver mas impactos para certificar el cambio climático, que Tailandia apuesta por las energías renovables y que esperan tener el 8% de su energía procedente de estas fuentes en 2011 y llegar hasta un 35% en 2020 (más ambicioso que la UE, y más que España, ¡deberíamos aprender de los tailandeses!). También explica que tienen planes para combinar adaptación y mitigación, por ejemplo desarrollando variedades de arroz que necesiten menos agua, que aguanten más el calor, y para mitigar que emitan menos metano (me pregunto si detrás de estas buenas intenciones estarán los transgénicos que además de las bondades que explica el señor de Tailandia acaban con la biodiversidad y esclavizan las producciones a merced de las grandes multinacionales de la biotecnología).
Tras el ministro asiático, toma la palabra Mr Onkokame Kitso Mokaila, Ministro de medio ambiente, vida salvaje y turismo de Botswana (Sur de África) (Para situarnos, Bostwana está al norte de Sudáfrica, y la esperanza de vida de sus habitantes es de unos 36 años). Onkokame explica que el cambio climático se manifiesta en su país con lluvias más extremas y con gran aparato eléctrico, días más calurosos, y sobre todo con el agravante de la inseguridad alimentaria. La disminución de la producción agraria en su país ha llegado a un 20% respecto del año 2000, además la presión a la que se somete a los recursos hídricos, en calidad y cantidad, afectará a los pastizales para el ganado, la agricultura, la flora y la fauna (vaya, no quedará títere con cabeza). Necesitan por tanto, según explica el ministro, mayores y mejores compromisos de reducción de los países ricos y el apoyo a través de la transferencia de tecnologías limpias, tal y como manda el Convenio Marco de Naciones Unidad sobre Cambio Climático (UNFCCC), ellos ya hacen lo que pueden y deben. La hoja de ruta de Bali debe conseguir dar continuidad al Protocolo de Kioto. Concluyó Don Onkokame. (Tiene mas razón que un santo).
Tras su intervención escucho unos aplausos, tal y como recibe todo el mundo. Es cortesía de la diplomacia reinante en Naciones Unidas ser amable con todas las opiniones y discursos, aunque a veces la efusividad en el aplauso se nota, tal y como ocurrió con la ovación cerrada que se llevó el ministro alemán tras un discurso comprometido y solidario con la causa.
Tomó la palabra Mr Earl Deveaux, Ministro de trabajo y empresas con servicios públicos de Bahamas (Antillas) y mostró su apoyo a todos los pequeños estados insulares como ellos y reconociendo el valor del Cuarto Informe de Evaluación del IPCC (AR4). Contó que el 80 % de su país está a un metro sobre el nivel del mar, por lo tanto si la temperatura media mundial se eleva más de 2 grados les hará desaparecer. Ya han visto inundaciones, la erosión de sus suelos, la falta de agua, y el mar que reclama la tierra. Hace un mes ya vieron como cayeron más del 50% del total de las precipitaciones anuales, que les anegaron, perdieron cultivos y turismo y, esto, pese a tener el programa de alerta temprana. A primeros de octubre pidió esfuerzos internacionales para atajar la vulnerabilidad de su país y cree que se debe reforzar el programa de acción para los pequeños estados insulares, pero con el reciente fondo de adaptación acordado no será suficiente, requerirá apoyo a la trasferencia de tecnología (este punto está bloqueado por los EE.UU y sus compinches Canadá, Japón, etc) y la financiación. Mucha gente piensa que esto no se puede alcanzar porque no se puede confiar en los líderes políticos de los países, pero él piensa que si, que están aquí para la noble tarea de salvar nuestro planeta y que Bahamas está dispuesto a hacerlo. (¡Sería imperdonable dejarles hundirse bajo el mar!)
Noruega (Europa) toma la palabra a través de su ministro de medio ambiente y de desarrollo sostenible, el señor Erik Solheim. Se dirige a la sala explicando que viene de Oslo y en la entrega del Nobel ha escuchado al señor Al Gore decir que es sólo cuestión de voluntad política, que tenemos los recursos, hemos gastado miles de millones en guerras y nada en cambio climático, y que lo estupendo de la voluntad política es que es un recurso renovable. Recuerda que el Nobel también fue para el IPCC homenajeando sus esfuerzos científicos, por lo tanto los esfuerzos que se hagan aquí también deben rendirles homenaje. El ministro recordó que Noruega está en el Ártico, y que el Ártico es de hielo y de nieve y allí están preocupados porque, si la temperatura media del planeta sube 2 grados, allí se dará un aumento de 4 grado, y esto retroalimentará el proceso de deshielo. Según él, este reto, junto con el de la pobreza, son los dos grandes temas que el mundo debe solucionar. Se necesitan soluciones. La mitigación es la cura y la adaptación el analgésico, dice. Ya se han dado 500-600 millones de euro para detener la deforestación y esta solución puede comenzar ahora mismo, porque la tecnología de “no talar” es una fácil tecnología y además de salvar el clima, se protege la biodiversidad. Lo lamentable de su discurso es cuando empieza a hablar de la Captura y Almacenamiento de Carbono, señalándola como otra solución para seguir con el modelo energético actual. Lo equivocado que está! No hay combustibles fósiles para el futuro ya que se agotan, además para capturar el carbono hace falta más energía para hacer los mismos procesos y si algún día estará disponible, lo será cuando ya el cambio climático haya arrasado con las pequeñas islas, con África,... De que nos valdrá entonces?) Señaló, para concluir, que tal y como dijo el representante de Singapur la pobreza jamás puede ser la solución del cambio climático.
Mr Emile Doumba de Gabón (vecino de Camerún, República del Congo y Guinea Ecuatorial) dice que Kioto es claro, y como dice el IPCC la amenaza es gravísima ya que pone en peligro elementos fundamentales para la vida, exige por lo tanto respuestas urgentes que se inscriban en un contexto de solidaridad. El cambio climático ocurre en un escenario único del que todo el mundo debe salir ganando pobres y ricos, y todos deben participar en la lucha a su nivel. Desde la Cumbre de Río, nos explica, que Gabón ha tomado medidas en materia de eficiencia y renovables, desde septiembre de este año han establecido una asociación con el sector privado y público para reducir emisiones hasta 2012, que tienen cuotas en la importación de gases que afectan a la capa de ozono y que quieren eliminarlos en 2010 (quizás España también podría tomar ejemplo de Gabón). Afirman que desde hace 10 años mantiene una política sostenible en materia forestal, mas del 73% de sus bosques son sostenibles y quieren llegar al 100%. Asumir la degradación de los bosques y evitarla está reconocido, y por ello quiere felicitar a los negociadores que han conseguido un resultado tan importante. Ya ha pasado el tiempo de tender la mano, África debe tener un papel importante para la lucha contra el cambio climático
El plenario sigue, pero hay noticias importantes en las negociaciones, esos discursos que no se dan en el plenario y que se celebran en pasillos, reuniones informales y formales, comidas, ...y es necesario saber lo que pasa fuera de allí...
Desde Bali, Raquel Montón, responsable de la campaña de Cambio climático de Greenpeace