Imagen área de la central nuclear de Cofrentes, en Valencia

El pasado 9 de agosto la central nuclear de Cofrentes (Valencia) sufrió una nueva avería, que se une al interminable listado de fallos y problemas de seguridad que padece esta central, y que evidencia el agotamiento de su vida útil.

En este caso, la anomalía ha consistido en la parada de una de las cuatro bombas que impulsan el agua altamente radioactiva del circuito primario de la central desde el condensador al núcleo del reactor (donde se encuentra el combustible nuclear). Esto ha ocasionado que se redujera la potencia de la central en casi 500 MW, cerca de la mitad de la potencia normal del reactor.

El condensador es el “intercambiador de calor”, es decir, extrae el calor generado en las reacciones nucleares del circuito primario al secundario, lo que permite mantener constante la temperatura del reactor. Al averiarse esta bomba ha disminuido el calor extraído y la central ha tenido que reducir potencia, o sea, generar menos calor, para que la temperatura del reactor no subiera peligrosamente. Se trata de un problema en el mecanismo primario de control de la central, y por partida doble: por un lado no entra suficiente agua enfriada en el núcleo del reactor y, por otro, reduce el vacío del condensador, y con él su capacidad de trabajo.

La plataforma Tanquem Cofrents, de la que forma parte Greenpeace (1), critica que los responsables de la central de Cofrentes no la hayan parado para poder descubrir la causa de esta nueva avería, la cual, en principio, podría afectar también al resto de la bombas de circulación del agua radioactiva. Este actitud vuelve a demostrar que la dirección de la central, propiedad de Iberdrola, prioriza la producción eléctrica y los benéficos económicos por encima de la seguridad de los trabajadores y de la población en general.

Tanquem Cofrents exige que se hagan públicos los resultados de la investigación sobre la causa de esta avería y las medidas que se van a tomar para que no se repita, y no se continúe con la política de falta de transparencia a la que ya nos tiene acostumbrados Iberdrola.

(1) La Plataforma Tanquem Cofrents agrupa a las organizaciones: Greenpeace, Intersindical Valenciana, Ecologistes en Acció-P.V., Joves Verds, Acció Ecologista-Agró, WWF-Valencia, CGT-P.V., Acció Pel Clima, Gecen, Compromís pel Territori, Xúquer Viu, Baladre, CAT-P.V., y Salvemos Mijares.