El 26 de abril de 1986, el reactor 4 de la central nuclear de Chernóbil sufría dos explosiones que provocaron un escape radioactivo inmediato. La explosión liberó 200 veces más radioactividad que las bombas atómicas de Hiroshima y Nagasaki, y la nube radioactiva viajó grandes distancias alcanzando Europa y todo el hemisferio norte.  Alrededor de 350.000 personas tuvieron que ser reubicadas o abandonar las zonas afectadas. 30 años después, más de 10.000 km2 de territorio son no aptos para realizar actividades económicas y unas 5 millones de personas viven en áreas contaminadas.

A pesar de que los datos ya impresionan, hay quien todavía defiende la energía nuclear. Pero, cuando escuchas la cruda experiencia de una persona que aún hoy se enfrenta a las consecuencias del accidente, resulta imposible seguir defendiendo esta energía. Svitlana Shmagailo, o Svieta para la gente que la conoce, es una testigo directa del accidente invitada por Greenpeace. Ella lleva una semana en España explicando una y otra vez por qué no quiere ni oír hablar de la energía nuclear. Y hoy, cuando se cumplen 30 años del desastre, tiene una cita en el mismo Congreso de los Diputados. Allí participará como invitada en la jornada organizada por la Fundación Equo, "30 aniversario de Chernóbil: Cuenta atrás para la energía nuclear en España".

Quienes hemos estado estos días con Svieta estamos seguros de que su testimonio no dejará indiferente a ningún representante político que la escuche. Ella sabeque no hay nada que pueda devolverle la vida que tenía en Ucrania antes del accidente, pero su mayor deseo es que ninguna persona en otro país con reactores nucleares, como España, tenga que sufrir una experiencia como la que a ella le ha tocado vivir.

Por eso hoy le pedirá a los políticos en el Congreso que hagan algo para que no sigamos expuestos al riesgo de una catástrofe nuclear en España, donde existen 7 reactores en funcionamiento y aún se debate si reabrir la vieja y obsoleta Garoña.

Nos quedamos con una de las frases que ha repetido una y otra vez: "En Chernóbil dijeron que era un experimento, en Japón la naturaleza, pero ¿cuántos errores más deben ocurrir para que aprendamos?"

¿Qué puedes hacer tú?

  • Firma por el cierre de las centrales nucleares en España.
  • Hazte socio/a de Greenpeace para que podamos seguir trabajando por el fin de la era nuclear.