En las últimas décadas, la salud pública se ha convertido en una variable más del mercado. Hasta dónde pueden las empresas comerciar con productos o sustancias concretas viene determinado por los potenciales efectos para la salud humana de su uso o consumo. Pero, ¿los límites actuales son suficientes? ¿se encuentra a salvo nuestra salud?
A medida que avanza el conocimiento sobre las afecciones que estos “revolucionarios” productos generan, más cuenta nos damos de cómo estamos pagando, en nuestras propias carnes, la factura de un desarrollo descontrolado e interesado.
Alimentos transgénicos, sustancias químicas peligrosas, que forman parte de nuestros productos de consumo cotidianos, los campos electromagnéticos o la nanotecnología con sus nuevas formulaciones..., todos ellos engrosan la lista de amenazas directas para nuestra salud.
A partir de este miércoles 16 y hasta el 18 se celebrará en Madrid, en la Universidad Politécnica, la Conferencia Internacional sobre Riesgos en Salud Pública y Medio Ambiente. Organizada por ENSSER, la Red Europea de Científicos por la Responsabilidad Social y Ambiental y en colaboración con otras instituciones, como La Fundación Vivo Sano-HDO o la Agencia Europea de Medio Ambiente (EEA), asistirán científicos y expertos independientes de diversas disciplinas y en los diferentes ámbitos de estudio para mostrar una radiografía lo más completa posible de la situación actual, de los riesgos asociados y de las necesidades de un cambio de modelo para hacer frente a estas amenazas.
La idea es aumentar la conciencia pública y, sobre todo, política de los riesgos sociales, económicos y ambientales de las tecnologías actuales y discutir los medios efectivos para combatirlos. Podremos conocer de mano de los mejores expertos mundiales cómo la variable “salud pública” determina los mercados y cómo el propio mercado trata de tergiversar los datos a su interés. Cómo, en nuestra vida cotidiana, nos exponemos a agentes peligrosos que nos condenan a un deterioro de la salud progresivo. Y cómo el compromiso político es clave para desequilibrar la balanza hacia el interés general y protegiendo de la salud en vez de ceder a los intereses comerciales de grandes empresas...
En resumen, esta conferencia internacional ofrece la oportunidad de conocer los últimos avances y crear un plan de acción con medidas claras hacia un sistema donde la salud pública no sea una variable sino una constante. En Greenpeace no nos lo queremos perder, allí estaremos y, desde allí, os lo contaremos.
Luís Ferreirim (@LFerreirim) y Sara del Río (@saradrio), campaña de Contaminación, Transgénicos y Bosques de Greenpeace