Si de repente y sin explicación se te rompieran los frenos del coche y tuvieras un grave accidente, ¿volverías a coger el mismo coche antes de aclarar el porqué del incidente? No sé tú, pero yo no lo haría.

Pues parece que a España no le basta con la duda de si la mancha de petróleo del Golfo de México llegará a nuestras costas, como se ha llegado a vaticinar, sino que se permite el lujo de seguir adelante con los proyectos de nuevos pozos de petróleo en Tarragona. Aunque ya causaron un vertido el año pasado por el que se ha abierto un procedimiento penal en los Juzgado de Tarragona por los vertidos producidos. Estos vertidos no se comunicaron a las autoridades y fueron finalmente detectados por Capitanía Marítima.

Son pozos petrolíferos en aguas profundas, así como lo era el Deepwater Horizon, que quiere explotar la compañía Repsol y con su contribución, llegaríamos a producir como máximo un escaso 0,5% del consumo español de crudo.

Hasta el Comisario europeo de Energía Gunther Oettinger, indicó que “cualquier gobierno responsable debería congelar los nuevos permisos para la perforación de pozos con parámetros y condiciones extremas".

Como no nos gustan los riesgos, en Greenpeace hemos presentado alegaciones para solicitar la paralización del proyecto por su elevado impacto ambiental y el creciente consenso mundial por una moratoria a estos pozos.

Pero no nos pararemos aquí. ¡Quédate conectado que en unos días queremos proponerte una oportunidad de sumarte a estas peticiones!

Sara Pizzinato, responsable de la campaña de Transporte de Greenpeace