La multinacional Procter & Gamble (P&G) es la reina de los productos de higiene personal y doméstica, y presume de que 5 millones de personas de todo el planeta utilizan sus productos, entre ellos el champú anticaspa Head & Shoulders. Pero lo que no deja el cabello tan limpio y sedoso es lo que P&G está haciendo con las selvas de Indonesia, algo que estos millones de consumidores deben saber.



Greenpeace presenta hoy el resultado de una investigación realizada durante el último año en el que ha podido verificar que P&G se abastece de aceite de palma de empresas vinculadas a la destrucción forestal generalizada. Sus políticas de abastecimiento de aceite también están vinculadas con los incendios forestales y la destrucción del hábitat del tigre de Sumatra, una especie en peligro de extinción.

El aceite de palma es un ingrediente común en los detergentes, champús, cosméticos y otros artículos de uso doméstico que fabrica P&G. Eso no quiere decir que el aceite de palma sea el problema, pero las plantaciones de aceite de palma proceden de la destrucción del bosque.

¿Y a mi cómo me afecta esto? Bueno, esta realidad significa que cada vez que tú y yo nos lavamos la cabeza con champú H&S (por ejemplo), ¡estamos permitiendo que la multinacional P&G nos meta la deforestación tropical en nuestra ducha!

Los investigadores de Greenpeace, que han estado sobre el terreno, han sido testigos de la deforestación producida en una plantación de aceite de palma en la concesión PT Wana Catur Jaya Utama, una filial de la empresa de Plantaciones BW, que es un proveedora de aceite de palma de Procter & Gamble, en la zona de Kalimantan Central.

¿Qué pruebas tenemos? Nuestra investigación muestra que P&G compra aceite de palma a diversas empresas, que a su vez compran el aceite a plantaciones implicadas en la destrucción ambiental.

Greenpeace demostró que grandes plantaciones vinculadas a la cadena de suministro de P&G están destruyendo el hábitat del orangután. Las tierras deforestadas son propiedad del Grupo de plantaciones BW, una empresa que también está vinculada a las muertes de orangutanes en el vecino Parque Nacional Tanjung Puting. Greenpeace ha documentado la tala continuada dentro de las concesiones de dos productores que suministran directamente a P&G.

Los productos de empresas que no tienen una sólida política ambiental para reducir la deforestación, tienen un riesgo muy alto de que estén asociados a prácticas ilegales, sobretodo en zonas como la provincia de Riau en Sumatra. Un buen ejemplo de ello es la concesión PT Rokan Adi Raya, que incluye área donde habitan ejemplares de tigre y además que es un área de turbera  profunda y una experiencia de tala a gran escala y los incendios incontrolados del año pasado.

El humo de los incendios en 2013 llegaron a afectar a 10.000 personas que sufrieron infecciones respiratorias agudas en la provincia indonesia de Riau. La mitad de las víctimas fue población infantil menor de cinco años. Concretamente en junio de 2013, se registraron más de 150 focos de incendios dentro de esta concesión. Y, precisamente, Greenpeace ha verificado que las empresas suministradoras de aceite de palma a P&G utilizan el puerto de Dumai, el principal puerto de la provincia de Riau.



¿Qué podemos hacer? ¡Es hora de que hagamos P&G cambie la forma de hacer las cosas!

Hay algunas empresas que ya se están trabajando para eliminar la destrucción de los bosques de sus cadenas de suministro. Entre ellas se encuentra una grande conocida por sus famosos cereales para el desayuno, Kelloggs, que se ha comprometido a eliminar la deforestación de su cadena de suministro, así como L'Oréal, Unilever, Nestlé y Ferrero.

En los últimos ocho meses, Greenpeace ha comunicado a P&G que está vinculado con la destrucción de las selvas de Indonesia, y de esta forma haciendo responsable a las personas que compran sus productos. En lugar de tomar medidas urgentes se ha dedicado a lavar su imagen. Es hora de que H&S se comprometa al 100% con la protección de los bosques y deje de vincular a su clientela en la extinción del tigre de Sumatra y del hogar de millones de personas que dependen del bosque.

¡No hay excusa para no actuar!

Ya se han unido más de 200.000 personas a este movimiento exigiendo productos que sean respetuosos con el bosque. Pide a la multinacional P&G que deje de vincularse con la destrucción de las selvas y Proteja el Paraíso.

Bustar Maitar, responsable de la campaña de Bosques de Indonesia de Greenpeace Internacional


 ¿QUÉ PUEDES HACER TÚ?
- Firma para pedir a P&G que se comprometa con la protección de las selvas de Indonesia.

- Greenpeace es una organización independiente que no acepta dinero de gobiernos o de empresas. Para seguir defendiendo una agricultura sostenible sin transgénicos necesita tu apoyo. Hazte socio de Greenpeace.