Mañana hará un mes de la protesta pacífica que se llevó a cabo en la plataforma petrolífera de Gazprom. Esta acción ha llevado a 30 activistas de Greenpeace a una cárcel rusa, en la que aún permanecen en prisión preventiva. A todos se les acusa de piratería y se enfrentan a penas de hasta 15 años de cárcel.
Ante esta desproporcionada acusación y la situación que están viviendo nuestros activistas, estamos recibiendo numerosas pruebas de solidaridad. 1.300.000 personas ya han firmado un escrito mostrando su apoyo a los activistas, se han hecho demostraciones de solidaridad en 250 lugares de 49 países en todo el mundo. Hemos recibido el apoyo de numerosas instituciones, organizaciones y personalidades de todo el mundo. Los apoyos siguen aumentando. No estamos solos y esto nos da fuerzas.
El mundo de la alta política también se está moviendo y, entre estas muestras de apoyo, se encuentran las de dirigentes políticos como la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, que pidió a Rusia por la libertad de la activista brasileña Ana Paula, e incluso hizo pública su decisión desde su cuenta de twitter; o el de Angela Merkel, la canciller alemana, que ayer se puso en contacto con el presidente ruso, Vladimir Putin, mediante conversación telefónica, para pedirle una salida para los activistas.
Hillary Clinton también ha expresado públicamente su preocupación por el estado de los treinta detenidos y ha pedido un movimiento internacional para su liberación.
Numerosas organizaciones, partidos políticos de muchos países están mostrando su solidaridad. Las Madres de Plaza de Mayo (Argentina) escribieron un emotiva carta al presidente Putin para pedir su liberación y mostraron su admiración y respeto por las personas que defienden el planeta.
Hoy nos hemos levantamos con la noticia de que 11 Premios Nobel de la Paz, entre ellos Desmond Tutu y Rigoberta Menchu han escrito una carta al presidente ruso ofreciendo su apoyo a los activistas. En su carta describen el Ártico como un “precioso tesoro de la humanidad” y apoyan todos los esfuerzos para protegerlo de las exploraciones petrolíferas y del cambio climático.
Y esto es lo que nos mueve. Gracias a todos, por el apoyo a los activistas y a su esfuerzo para proteger el Ártico. Estamos convencidos que la amenaza a la que se enfrenta el Ártico exige que se tomen medidas urgentes para protegerlos, y ahora más que nunca pedimos el fin de la extracción de petróleo en las aguas heladas del Ártico y por su puesto la liberación de todos los 30 activistas.
Alicia Cantero, campaña de Ártico de Greenpeace
- ¡Te necesitamos! Firma para pedir a la embajada rusa que libere a los activistas de Greenpeace