El tópico dice que los incendios se apagan en invierno, cosa que no es cierto. En invierno se apagan los incendios que se producen en invierno, como los que afectaron este año al Parque Natural de Fragas do Eume (Coruña) o la localidad de Hermisende (Zamora), este último con 2.329 hectáreas que ardieron en el mes de febrero. En verano se apagan los que se producen en época estival. Idem los de otoño, como los que asolaron Galicia en octubre de 2011. Los incendios se producen en diversas épocas del año, pero sólo en verano son noticia.

Lo que este tópico debe querer decir es que debemos mantener una actividad preventiva todo el año, aprovechando los meses de menor riesgo para hacer trabajos selvícolas de prevención y para gestionar una gran parte de los montes españoles que están abandonados. Y, en efecto, es ahora cuando el Estado y las CC.AA. deben dar un empujón significativo a la prevención para empezar a combatir los incendios de 2013.

De manera especial, se hace necesario establecer estrategias, a corto y medio plazo, que reduzcan la carga de combustible que acumulan gran parte de nuestros montes. Los montes no deben estar limpios (otro tópico). Los bosques son algo más que árboles, y no deben parecerse a los parques urbanos. El matorral, los arbustos, setos, ramas rotas, árboles caídos tienen una función importante en el monte. Por eso decimos que hay que gestionar la biomasa de tal forma que llegado el fuego, los montes no ardan con tanta facilidad. Gestionar no quiere decir eliminar todo lo que haya en el suelo.  Y para este cometido sería fundamental fomentar la ganadería extensiva y deshacer el bloqueo a la utilización de biomasa para la producción de energía (preferentemente calor). Incentivar el consumo de productos forestales puede ser también una forma de favorecer la ordenación de los montes y los aprovechamientos forestales.   

En las próximas semanas se discutirán los presupuestos generales para el próximo año, y es ahora cuando sabremos si los montes españoles, la mitad de la superficie del territorio nacional, importan o no importan. Ahora sabremos cuánto dinero se destinará a la gestión forestal y la prevención. Aunque el borrador de presupuestos contempla un incremento de las partidas destinadas a Defensa contra Incendios Forestales, el Ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente aplicará recortes drásticos en proyectos cofinanciados por la Unión Europea destinados a la conservación de la biodiversidad y la dinamización del medio rural. El Ministro Miguel Arias Cañete tiene también una oportunidad de aumentar estas partidas apostando porque las políticas de Desarrollo Rural de la futura Política Agraria Comunitaria prioricen la gestión forestal de los montes.

No podemos permitir que los incendios forestales dejen de ser noticia ahora que la alarma social provocada por lo ocurrido este verano debería traducirse en hechos. Hasta ahora, la temporada de incendios ha dejado mas de 200.000 hectáreas afectadas, siendo el peor año desde 1994. En especial, conviene recordar las 9 víctimas de estos incendios y la gran alarma social provocada por los 37 grandes incendios forestales (los superiores a 500 ha): Andilla (20.000 ha), Cortes de Pallás (29.000 ha), Hellín (5.400 ha), Alt Ampurdam (14.000 ha), La Gomera (4.126 ha), Robledo de Chavela (1.200 ha), Mijas (8.225 ha), Chulilla (5500 ha), etc.

Los incendios de 2013 se empiezan a apagar ahora.

Miguel Ángel Soto (@NanquiSoto), responsable de campañas de Biodiversidad de Greenpeace

- Post 21/08/2012: Más presupuestos y menos demagogia contra los incendios forestales