Todavía sin salir de mi asombro por la permisividad del ministro de Defensa ante las denuncias de acoso sexual y laboral denunciadas por la Capitán Zaida Cantera, ayer me dió por contarle a mi sobrina de 9 años que Pedro Morenés antes de ser ministro trabajaba en una empresa que fabricaba bombas (Instalaza). Y que acababa de leer en el diario Público que ya siendo ministro, su ministerio ha suscrito 32 contratos a dedo con empresas de las que era consejero o asesor. Con esa inteligencia descarnada que da tener tan tierna edad, me preguntó: “¿pero es ministro de Defensa o de Ataque?"



Instalaza S.A. es un vieja conocida del Gobierno. En 2010 reclamó al Ejecutivo español 40 millones de euros de indemnización en concepto de “daño emergente y lucro cesante” ante las pérdidas que le causó la adopción del Tratado contra las bombas de racimo y su incorporación al marco legal español. Tras la negativa del Gobierno, presentó una denuncia ante la Audiencia nacional por esta misma causa, quien finalmente desestimó la indemnización.

Y ahora me entero de que la ex empresa en la que trabajaba Morenés, que reclama primero y denuncia después al Gobierno por cumplir el histórico tratado que prohíbe las bombas de racimo, un tipo de armamento que actúa de forma indiscriminada, que se calcula que ha causado unas 100.000 muertes, que no distinguen entre blancos civiles y militares y que, por sus altas tasas de error, siguen causando muertos y heridos mucho tiempo después de que un conflicto haya finalizado, es la elegida por el ministro de Defensa para adjudicarle contratos por muchos millones de euros. ¿A alguien le parece esto lógico o decente?

Hemos sabido de esos contratos gracias a una pregunta hecha en el Congreso por el diputado Jon Iñarritu. En su respuesta, el Gobierno no ha detallado ni cómo fueron adjudicados los contratos ni tampoco el importe de los mismos. ¿Es ésta la información que nos merecemos los ciudadanos?

La política de puertas giratorias es ya tan común en nuestro país que es imposible llevar la cuenta del número de personas dedicadas a la política que se apuntan a ella, pero a mi me sigue irritando que se practique. Y me irrita todavía más todavía que un Gobierno que dice representar a todos los españoles, no dé explicaciones. ¿Qué tiene que ocultar? ...