El pulmón verde del planeta está enfermo y lo sabemos perfectamente. Necesita una intervención quirúrgica urgente y el veto de la presidenta Dilma podría haber sido el bisturí que extirpase el cáncer de la deforestación en la Amazonia.

Cada vez nos extraña menos que los políticos no cumplan sus promesas electorales y Dilma no ha sido una excepción. La presidenta había prometido en su campaña proteger la Amazonia y tener mano dura con aquellos que la están esquilmando, pero no ha sido así.

Dilma no ha cumplido las expectativas de su pueblo y tampoco ha escuchado las miles de voces de todo el mundo que han gritado alto y fuerte que la Amazonia debe ser protegida eficazmente.

¡Más de dos millones de personas han pedido a la presidenta un veto total del nuevo Código Forestal, entre ellas es muy probable que estés tú! ¡Muchas gracias por tu apoyo!

Pero no todo está perdido. Este hito histórico debe darnos fuerzas para continuar reivindicando la protección de la Amazonia. Nunca antes se había alcanzado una cifra como esta, además en un tiempo récord.

Tenemos otra oportunidad: la Ley de Deforestación Cero, una iniciativa ciudadana que pretende establecer una solución definitiva y permanente para la Amazonia. Por ello el Rainbow Warrior seguirá su expedición en Brasil hasta la cumbre de Río +20, donde Dilma tendrá que dar la cara y enseñar al mundo que lo que se está haciendo en Brasil está muy lejos de fomentar el desarrollo sostenible. Podría haber sido todo lo contrario...

A lo largo y ancho del mundo seguiremos recogiendo firmas de brasileños y brasileñas que hagan que esta Ley sea una realidad. ¿Quieres ayudarnos?

Cuando los políticos no cumplen con su palabra tenemos que unirnos aún más.

Cada vez más personas saben que la Amazonia se merece mucho más que motosierras rugiendo en su corazón, por eso desde Greenpeace seguiremos trabajando con toda nuestra energía para que en 2015 se consiga la Deforestación Cero en la Amazonia y en 2020 en el mundo entero. Porque hay operaciones para las que no son necesarias las motosierras, sino que es suficiente con una pluma y buena voluntad. ¡Firma para Salvar la Amazonia!

Luís Ferreirim (@LFerreirim), responsable de la Campaña de Agricultura y Bosques de Greenpeace