Ya sé que la vuelta después del verano se hace cuesta arriba pero, para mantener un poco más los recuerdos de las playas, vamos a imaginarnos en Hawaii. Tú también ves en tu imaginación playas paradisíacas, volcanes y dioses surferos, ¿verdad? Sin embargo pocas personas saben que este archipiélago plantado en medio del océano pacífico, además de ser hermoso, se ha propuesto poner en ridículo a la mayoría de países que, aún siendo ricos, no se atreven a dejar atrás a las energías sucias.
Lo cierto es que Hawaii no tiene demasiadas opciones, ya que el cambio climático amenaza su existencia, así que hace un tiempo decidió que antes de 2045 abastecería el 100% de la electricidad consumida en sus 5 islas con energías renovables. Eso ya fue un bombazo pero es que ahora el sector eléctrico junto con la agencia de regulación tenían que presentar un plan de primeros pasos para alcanzar el objetivo político adquirido y… ¡sorpresa! No sólo no se ha presentado ningún plan para incumplir el objetivo (un clásico inevitable en España) sino que lo que se plantea son diferentes posible rutas que acompasan seguridad de suministro y adelanto del cumplimiento del objetivo aunque este fuese ya el más ambiciosos de todo el país (Estados Unidos).
¡Y más sorpresas! Las empresas del sector eléctrico siguieron un proceso abierto y colaborativo para desarrollar el plan, participando en talleres con las múltiples partes interesadas (sí, sí, incluidos ecologistas, consumidores, otros sectores económicos, administraciones locales, etc.) y conferencias técnicas para compartir información e ideas. Los planificadores utilizaron herramientas y técnicas punteras en la industria para analizar los múltiples escenarios para equilibrar las necesidades de dar al sistema al mismo tiempo fiabilidad, eficiencia económica y sostenibilidad ambiental.
No todo estaba en manos de las empresas. Otras instituciones del país proporcionaron análisis técnicos independientes adicionales a los presentados por las eléctricas. Y todos públicos. Otra rareza por este lado del mundo.
Pero es ahora cuando viene lo gordo. Prepárate: el objetivo estatal de 2015 de energías renovables ya está pulverizado y las previsiones indican que lo mismo ocurrirá con los objetivos intermedios y van a adelantar 5 años la obtención de un sistema 100% renovable.
Para mantener la fiabilidad del servicio eléctrico (es decir, que no haya cortes de luz), no se han presentado una fuerte batería de nuevas subvenciones para mantener las centrales contaminantes más allá de toda lógica ambiental o económica tal y como se hace en España con el respaldo del Gobierno. No, el plan hawaiiano prevé la instalación de sistemas de almacenamiento de energía y el uso de otras tecnologías para gestionar la red eléctrica de manera inteligente y acompañar los nuevos recursos renovables necesarios a la lucha contra el cambio climático.
Y no es todo: el plan incluye un crecimiento continuo del autoconsumo y describe el trabajo necesario para expandir y mejorar la infraestructura de la red y utilizar las versiones más nuevas de la tecnología disponible para ayudar a integrar fiablemente un total estimado de 165.000 instalaciones particulares para 2030 (Hawaii tiene una población de casi un millón y medio de personas).
En España estamos jugando el partido al revés: las eléctricas con el firme apoyo del Gobierno se oponen al autoconsumo para que nada cambie en el sistema eléctrico bajo el supuesto (nunca demostrado) que los autoconsumidores constituyen un peligro para el sistema eléctrico.
Yo no sé qué pensáis vosotros, pero visto que el Gobierno español está preparando una ley de Cambio Climático y Transición Energética así como el Plan de Energía y Clima para 2030, igual no sería mala idea aprovechar que seguramente también al señor Ministro de Energía se le está haciendo cuesta arriba la vuelta de las vacaciones e invitarle a que las extienda un poco con una visita a Hawaii a ver si se deja inspirar por las playas paradisíacas, los volcanes y los dioses surferos.