“Hablemos en serio, seamos realistas”. Llevo una década escuchando estas palabras, cada vez que Greenpeace publica que salvar el clima es posible y que esto pasa, necesariamente, por un cambio de modelo energético a un sistema 100% renovable, eficiente y racional.

Sin embargo el tiempo y la Agencia Internacional de las Energías Renovables nos van dando la razón. No sólo será posible un 100% renovable sino será más barato, generará más empleo y permitirá a toda persona que lo quiera, desperezarse del papel pasivo de mero pagador de facturas para ser también generador de energía renovable o elemento activo de gestión de la demanda.

 

Tan sólo hace unos días, la Agencia Internacional de las Energías Renovables (IRENA) publicaba su nuevo informe Los beneficios de las Energías Renovables: midiendo su comportamiento económico, en el que respaldaba abiertamente y ponía como ejemplo de metodología macroeconómica avanzada, aquella empleada precisamente en uno de los últimos estudios de Greenpeace, que estima el impacto sobre el empleo y el valor añadido del sector de las renovables y su cadena de suministro en España.

Se trata del informe El impacto de las energías renovables en la economía con el horizonte 2030 - Impactos en la macroeconomía elaborado por Abay Analistas Económicos y Sociales para Greenpeace en 2014. Sus resultados más destacados para el año 2030 son: un sistema eléctrico basado al 95% en renovables en España generará más de 3 millones de empleos ligados a la construcción de nuevas centrales energéticas, un crecimiento anual de 2 puntos en el PIB y un aumento de la producción de más de medio billón de euros. Además, la producción eléctrica en el año 2030 creará otros 203.000 puestos de trabajo. Pero por si esto no fuera suficiente, bajará tu factura de la luz. Un 25% menos que en 2012, beneficiando especialmente a los colectivos más vulnerables.

¿Qué puedes hacer tú?

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