Magazine / diciembre 2012

La opinión

© 2002 Greenpeace/ Kurt Prinz

El petróleo mata

La imagen elegida tiene diez años. Activistas de Greenpeace frente a la delegación de Gobierno de A Coruña, con sacos de fuel recogido en las playas gallegas. Y es que hace diez años a muchos de nosotros se nos encogió el estómago y el alma comprobando como el Prestige, esa chatarra flotante que nunca debió partir en lo que sería su último viaje, se partía en dos y se hundía frente a las costas gallegas.

La movilización social demostró que el medio ambiente es más importante para la sociedad de lo que los políticos y la industria petrolera creen.

Los gobernantes de entonces que, paradojas del destino, son mismos de ahora, fueron incapaces de gestionar con diligencia una situación superlativa. Un cúmulo de erróneas decisiones, fuera y dentro del país, tiñeron de luto las costas gallegas y buena parte de la costa cantábrica. Ante la incapacidad de sus gobernantes, el pueblo se levantó. Llegaron voluntarios de todos los rincones del planeta para plantar cara a la marea negra.  La movilización social demostró que el medio ambiente es más importante para la sociedad de lo que los políticos y la industria petrolera creen.

No deberíamos tolerar que se perpetúe un sistema energético que no está al servicio de las personas y que agrede al clima. Tampoco que en la sala donde se celebra el juicio por la marea negra del Prestige no estén muchos de los responsables que la ocasionaron. Hace diez años les decíamos a los gobernantes que “el petróleo mata”. Hoy seguimos manteniendo el mismo mensaje. Esperamos que tomen nota y que no haya nunca una nueva marea negra que nos haga repetirlo.



Mario RodríguezMario Rodríguez
Director ejecutivo de Greenpeace España
@mario_rod_var