Rozando los dos millones de hectáreas la agricultura ecológica vuelve a batir un nuevo récord en España en 2015. Esto supone un incremento del 18,4% respecto a 2014 y de casi el 60% en los últimos 10 años. España sigue así en la cabeza del pelotón en la UE en cuanto a la superficie destinada a la agricultura ecológica. Por ello, desde Greenpeace, queremos felicitar a todas las personas que hacen cada día que esto sea una realidad, pero muy en particular a los agricultores y agricultoras que permiten que a nuestros platos lleguen alimentos sanos y respetuosos con el medio ambiente.



Sin duda las comunidades autónomas que más destacan por su crecimiento casi continuo son Andalucía (¡en 2015 ha superado el millón de hectáreas y un 23% de la superficie agrícola ya es ecológica!), la Región de Murcia (ojalá los datos de 2016 sean realmente alucinantes y consiga alcanzar el 27% en ecológico que ha prometido la Consejera de Agricultura, en particular porque es donde más plaguicidas se utilizan por hectárea en la España peninsular), Cataluña, Castilla La-Mancha (esperamos que la controversia generada no afecte la progresión de los últimos años), Valencia, caminando a pasos largos hasta su compromiso de alcanzar el 20% de superficie en ecológico para 2020 y las Islas Baleares donde ya el 15,4% de la superficie agrícola se cultiva en ecológico.

Pero no todo son buenas noticias cuando analizamos los datos ofrecidos por el MAPAMA. Por un lado vemos que la superficie en ecológico es solo un 8,3% de la superficie agrícola utilizada y por otro que en algunas comunidades autónomas, al contrario de la tendencia generalizada, la superficie viene disminuyendo. Es particularmente preocupante que en La Rioja, Aragón (campeona por otro lado de los cultivos transgénicos) y Cantabria la superficie en 2015 sea inferior a la de hace 10 años.

Otro aspecto que deberían contemplar las estadísticas del Ministerio es el consumo interno de productos ecológicos, dónde estamos muy por debajo de la media de la UE (21,7€ per cápita en España frente 47,4€ de la media de la UE). Potenciando el consumo interno, la agricultura ecológica en España puede despegar como un cohete.

Cuando la agricultura industrial nos lleva cada vez más hacia el borde del precipicio, la agricultura ecológica muestra todo su poder y se presenta como una “multisolución” para muchos de los retos a que nos enfrentamos actualmente y que podrán verse agravados en un futuro próximo: cambio climático, pérdida de biodiversidad, contaminación de acuíferos… pero también la pérdida de agricultores y población rural, entre otros. Para que funcione de esta forma hay que ponerse las pilas, pero unas pilas bien cargadas.

Por ello, desde Greenpeace y otras organizaciones hemos propuesto al nuevo gobierno que se comprometa incrementar la superficie agrícola en ecológico para que alcance en 2020 al menos el 30% de la superficie agrícola utilizada. Hay que apostar seriamente por un modelo de agricultura que pueda alimentar a las personas pero que a la vez respete los límites planetarios.

Dentro de nuestra campaña para salvar a las abejas la agricultura ecológica aparece precisamente como la solución a largo plazo. Si aún no has firmado nuestra petición este es el mejor momento. ¡No lo dejes para mañana, hazlo ahora!