Hoy nos despertamos con esta gran noticia, “Monsanto retirará peticiones de aprobación en UE para cultivos transgénicos”, que nos ha llenado de alegría y la queremos compartir.

En mayo Monsanto anunció que se retiraba de Europa pero nos faltaba un movimiento que realmente lo confirmara y éste ha sido.

Sin duda, cada vez son más las evidencias de que los transgénicos no son la solución. Llevan años anunciando que los transgénicos son la solución al hambre, entre otras cosas, y esto no son más que falsas promesas, que caen por su propio peso. ¡Según la FAO, en el planeta siguen habiendo 870 millones de personas que pasan hambre!

Por otro lado vemos como crece la oposición a los transgénicos en todo el mundo y las últimas encuestas en la UE revelan que el 95% de la ciudadanía coincide en que “lo correcto” es utilizar productos respetuosos con el medio ambiente y los transgénicos no lo son. Los cultivos transgénicos solo siguen siendo posibles porque no sabemos lo que comemos. Cerca del 80% de los cultivos transgénicos alimentarios se destinan a llenar el estómago de la cabaña ganadera, en constante crecimiento, de los países desarrollados y los derivados de esos animales (carne, leche, huevos...) no se etiquetan, sino otro gallo cantaría.

Pero en Europa hay un tentáculo muy gordo, el Gobierno español, que apoya y promueve los cultivos transgénicos aislando cada vez más a España del resto de Europa. Lamentablemente, Monsanto no ha retirado la autorización del maíz transgénico MON810, el que se cultiva principalmente en España y, a menor escala, Portugal.

Nosotros sabemos que estamos haciendo lo correcto. Desde Greenpeace consideramos que solo apostando por la agricultura ecológica, la verdadera solución, podremos garantizar una agricultura respetuosa con el medio ambiente y garantizar alimentos sanos para nosotros y las generaciones futuras.

Instamos a Monsanto, y al resto de empresas y gobiernos que promueven los transgénicos, a que hagan una reflexión profunda y apuesten también por la agricultura ecológica, no como un lavado de imagen, sino como la única vía posible para evitar que todos nos precipitemos en el abismo.
Tenemos información y datos de sobra para construir una opinión fundamentada contra los transgénicos y dejar de escuchar a los auténticos “vendedores de loción crecepelo” que promueven esta tecnología.

En abril, durante la Semana Estatal de Lucha contra los Transgénicos y por la Soberanía Alimentaria, escribíamos que “tarde o temprano caerá el Goliath transgénico”. ¡Estamos seguros que así será porque cada vez tambalea más! Solo hace un empujón fuerte y entre todos lo vamos a conseguir. ¡Podéis estar seguros que desde Greenpeace no desistiremos!

Luís Ferreirim (@LFerreirim), responsable de la campaña de Agricultura y Transgénicos de Greenpeace España