En su visita a Israel el pasado mes de marzo Barack Obama se encontró con una sorpresa inesperada: una pancarta gigante (150 m2) en la que se leía “Obama: detén las perforaciones en el Ártico”. Le instábamos así a proteger las aguas estadounidenses que se encuentran dentro del Ártico, declarándolas “zona vedada” a la explotación industrial.
La acción, que tuvo lugar en Jerusalén, contó con la participación del equipo de Greenpeace España. La pancarta fue diseñada y producida en nuestro país, y entre los escaladores que la desplegaron se encontraba un bilbaíno.
Esta petición a Obama es un paso más de nuestra campaña “Salva el Ártico”, con la que pretendemos en última instancia que la ONU declare al Ártico santuario global para protegerlo de la pesca industrial y la explotación petrolífera. Tú también puedes pedirle a Obama que salve el Ártico, y sumarte a las casi 600.000 personas que ya lo han hecho, firmando en www.greenpeace.es