Este año se cumple el décimo aniversario de la publicación del informe “Renovables 100%”, un estudio pionero que demostró que las energías renovables venían para quedarse.
El informe “Renovables 100%” es hoy un mito hecho realidad; un antes y un después en la carrera hacia la “renovación” energética de España y un estudio de referencia para expertos y expertas del sector de la energía. Fue elaborado por el Instituto de Investigaciones Tecnológicas de la Universidad de Comillas con la coordinación de Greenpeace, y su elaboración duró varios años.
Cualquier persona conocedora del funcionamiento del sistema energético del Estado español podría corroborar estas afirmaciones y entre los periodistas era conocido que el entonces ministro de Industria y Energía, el hoy eurodiputado José Blanco, usaba este estudio como referencia para defender las renovables.
El informe cumple diez años este 2017 y analizaba la cantidad de electricidad que se podría producir con renovables en la España peninsular en el horizonte 2050. El análisis fue completado con otro exhaustivo informe: el “Renovables 2050”, para verificar la viabilidad técnica y económica de suministrar completamente las necesidades de electricidad al 100% con energías renovables hasta ese año. Ambos estudios fueron los primeros del proyecto “[R]evolución Energética” de Greenpeace en España. Un hito porque nunca antes alguien se había planteado abastecer el mercado energético solo con renovables, algo que hoy parece al alcance de la mano de cualquier gobierno.
Hubo quien se sorprendió de que Greenpeace se dedicase a publicar estudios tan técnicos y detallados y, más aún, hubo sorpresa por las conclusiones, sobre todo al comprobar que estaban respaldadas por una metodología rigurosa y solvente. ¿Por qué hacía esto Greenpeace? “No faltaban respuestas, faltaban las preguntas” comenta José Luis García, entonces coordinador del estudio y hoy jefe del Área de Energía de la organización ecologista. “Es decir, faltaba quien se atreviese a formular las preguntas adecuadas a quien tenía la capacidad de elaborar las respuestas, porque hasta entonces la línea de pensamiento dominante, tanto entre los directivos de las empresas como entre los políticos, era la de que las renovables solo podrían tener una contribución limitada en la tarta energética. Y esa visión limitada y limitante lastraba cualquier decisión de impulso a las renovables”, recuerda García.
“Parece que el futuro energético se ha convertido en una cuestión ideológica y no técnica ni económica”.
José Luis García, físico, ecologista y una figura reconocida y respetada en el entorno político y económico, fue de las primeras personas que habló en España de la intervención de las energías renovables para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y tratar de frenar así el cambio climático, por eso apostó decididamente por la realización de este estudio.
“Hacía falta cambiar de paradigma respecto al papel que podrían jugar las energías renovables, porque existía una enorme brecha entre la envergadura del problema del cambio climático y la creencia de lo que se podía hacer para resolverlo”, asegura García.
Este informe pionero abrió el camino a otros realizados posteriormente por las propias empresas y otras entidades, que han venido a constatar que un abastecimiento exclusivo con renovables es perfectamente posible.
Diez años después de la publicación parece más bien que el problema está en manos de quienes deben tomar las decisiones clave, que se encuentran presionados y divididos entre los partidarios del “viejo modelo” energético y los que creen en uno nuevo más “moderno” y “revolucionario”. La necesidad de cierto apoyo público a las renovables, al menos los primeros años, plantea que a veces el futuro energético se haya convertido en una cuestión ideológica y no técnica ni económica.
Con los compromisos del acuerdo del Clima de París como telón de fondo, que obligan a reducir emisiones de manera significativa en los próximos años, chocan dos concepciones bien diferentes del rol que puede y debe corresponder a las renovables: un papel complementario como un elemento más del sistema, o uno protagonista capaz de desplazar a las formas convencionales de generación hasta sustituirlas completamente.
“Aquí cobra especial relevancia el “Renovables 100%”, que una década después hace que la respuesta parezca clara”, asegura García, quien no se atreve a pronosticar cómo será el futuro dentro de otros diez años, “probablemente habrá más renovables, porque son más baratas y eficientes, además el cambio climático no perdona y notaremos más sus impactos, lo ideal sería que ya nos encamináramos hacia ese 100% renovables en España, porque es necesario y porque es posible. Solo espero que esto también lo piensen los políticos”.
ENCUENTRO CON PERIODISTAS Y MESA REDONDA
Con motivo del décimo aniversario del informe, Greenpeace organizó un encuentro con periodistas y una mesa redonda con expertos y expertas del sector energético para debatir sobre cómo ha cambiado la situación en estos dos lustros. El reconocimiento al trabajo fue unánime y se auguró un prometedor futuro a las renovables como solución para frenar los peores efectos del cambio climático.
Texto Conrado García del Vado