Tras la autorización a última hora de la manifestación en París, la sociedad civil desafío el frío y el miedo y salió a la calle el 12 de diciembre. Mientras los delegados discutían el texto final, bicicletas, pancartas, y lemas inundaron la capital gala para salvar el clima. Además, más de 3.000 personas formaron el mensaje “Justicia Climática para la Paz” visible desde el aire. Entre ellos, activistas de Greenpeace formando la “E” de “peace”.