Este verano la carrera por frenar la destrucción del Ártico llegó al mundo de la F1. El pasado 25 de agosto, Greenpeace protestaba en el transcurso del Gran premio de F1 de Bélgica contra la petrolera Shell, patrocinadora del evento deportivo, por sus planes de extaer petróleo en el Ártico.
Quedó claro que Greenpeace perseguirá a la petrolera en cualquier lugar del planeta para denunciar su irresponsable actitud.
Esta foto en el podio de vencedores de la carrera fue el colofón de una acción que comenzaba horas antes cuando activistas de Greenpeace eludiendo la seguridad en el Gran Premio Shell de Fórmula 1 escalaban el tejado de la tribuna principal para desplegar una pancarta de 20 metros de largo, dirigida al palco de los invitados VIP con el lema: “¿Petróleo en el Ártico? Shell NO". Y lo hicieron porque el futuro del Ártico, gravemente enfermo por el impacto del cambio climático, sería muy negro si petroleras como Shell, responsables entre otros del estado actual del enfermo, se salen con la suya y consiguen perforarlo para extraer petróleo. Hay que seguir luchando para impedirlo.
Mario Rodríguez, director ejecutivo de Greenpeace España
@mario_rod_var