La presión de la ciudadanía y las organizaciones sociales navarras, junto con el voluntariado de Greenpeace Navarra/Nafarroa , consiguen que el Parlamento de Navarra solicite declararla "territorio libre de fracking"

Fracturación hidráulica o “fracking”, algo está cambiando… en Navarra. Y no me refiero a que algo haya cambiado respecto a los cinco permisos de exploración que afectan a Navarra, ni sobre la técnica a emplear ya conocida por muchas personas, ni siquiera han cambiado los informes científicos que siguen alertando sobre los enormes impactos que tiene esta técnica sobre la salud de las personas y el medio ambiente. Tampoco ha cambiado nada la realidad del “fracking” en los EE.UU. donde siguen aumentando los casos de contaminación y afecciones a la salud a la par que aumenta el número de pozos.

Lo que sí está cambiando, son las conciencias de las personas que vivimos en Navarra y en consecuencia, la de sus representantes políticos. Hemos pasado en un año, de no querer ni tan siquiera debatir la problemática de la fracturación hidráulica en la institución de representación ciudadana por excelencia que es el Parlamento de Navarra, a aprobarse por mayoría ayer mismo, una moción que insta al Gobierno de la Comunidad a declarar Navarra territorio libre de fracking y la necesidad de apostar por un consumo racional, la eficiencia energética y por supuesto por las energías renovables.

Y este cambio no hubiese sido posible sin el trabajo desinteresado de las personas que integramos la Nafarroa Fracking Ez Plataforma Navarra Anti Fracking, en la que participamos activamente voluntari@s de Greenpeace Navarra Nafarroa. Un trabajo, a través de charlas, mesas informativas, artículos en prensa, reuniones con políticos que ha conseguido que 23 localidades navarras se declarasen libres de fracking. Y este trabajo no ha terminado con la declaración del Parlamento, vamos a seguir acercando la grave realidad de la fracturación hidráulica a todas las personas que quieran escucharnos, localidad por localidad, porque estamos convencidos que sólo la oposición firme de la ciudadanía puede parar esta sinrazón.

 Iñaki Larrañeta. Voluntario de Greenpeace Navarra Nafarroa

Foto: © www.ecologiaverde.com