Unos minutos han hecho falta para que los países que están reunidos en Eslovenia en la reunión de la Comisión Ballenera Internacional hayan tumbado la propuesta de Santuario para las Ballenas en el Atlántico Sur. Una vez más ha podido más el lobby de pasillo que la presión de la gente, de las casi un millón de personas en todo el mundo que habéis firmado para conseguir este santuario.
¿Pero cómo puede ser esto? Llevamos más de un año trabajando junto con el gobierno de Brasil para que el Santuario fuera una realidad. El gobierno de Brasil había vuelto a presentar, no es el primer año que lo hace, una propuesta de creación de Santuario mejorada y con un plan de gestión de la zona impoluto. Sin embargo a pesar de que ha habido 38 votos a favor, y sólo 24 en contra y dos abstenciones, no se han alcanzado las ¾ partes que son necesarias para que se apruebe un Santuario de Ballenas por la CBI.
Aunque todavía hay espacio para la esperanza, no todo está perdido... en dos años el Gobierno de Brasil volverá a la reunión de la CBI con la misma propuesta mejorada, aún más si cabe. Dentro de dos años la CBI se reune en Brasil y esto le dará más presión y más fuerza a la protección de esta zona.
Dos años. Ahora hay que esperar dos años. La vida de las ballenas y otras especies de mamíferos marinos están amenazadas por el impacto de los seres humanos, no solo es la caza de ballenas, sino la contaminación acústica, la contaminación química, los desechos marinos, las colisiones con embarcaciones, el enredo en redes de pesca, el cambio climático y la acidificación del océano.
Así que en estos dos años no nos vamos a quedar parados. Después de la mala noticia de hoy, de secarnos las lágrimas y guardar la rabia en un cajón, vamos a seguir trabajando incansablemente ¿Dos años? Pues dos años que vamos a estar dando guerra para que escuchen a todas las personas que defienden los océanos y por tanto las ballenas. ¡Gracias por vuestra firma! ¡Seguimos!