Desde el campamento de los Sioux nos piden que mostremos nuestra solidaridad contra el oleoducto de Dakota (Estados Unidos).
Copy: Gokhan Cukurova 2016
Desde hace varios días, decenas de personas están arriesgando sus vidas en Standing Rock. En algunos medios hemos visto la violenta y desproporcionada actuación de la constructora contra los activistas. Fuerzas de seguridad privada han utilizado perros y sprays de pimienta que han herido a 30 activistas, niños incluidos. En Dakota se está deteniendo a los activistas por el mero hecho de proteger el agua.
El oleoducto iniciará sus operaciones el 1 de enero de 2017, cuando comenzará a transportar cada día casi 500.000 barriles de petróleo proveniente de fracking desde Dakota del Norte a Illinois. El oleoducto cruzará el río Missouri y tierras sagradas para los Sioux.
Durante dos meses se han organizado diferentes protestas contra la empresa Army Corp of Engineers (que es la que emite los permisos para la construcción de la tubería), contra los inversores, las empresas de seguridad y todos los funcionarios que empujan el proyecto hacia delante. Es importante que estas empresas entiendan que todo el planeta les está observando. Como físicamente no podemos estár allí, podemos desde aquí apoyar su lucha.
Si entras en esta página (en inglés) puedes encontrar diferentes herramientas para difundir esta lucha. Desde participar en acciones pacíficas en todo el mundo hasta difundir el problema por redes sociales con los hashtag #NoDAPL, #WaterIsLife ó #WorldWaterOne. Pues esta batalla va más allá del oleoducto de Dakota. En todo el mundo luchamos contra las mismas empresas y los sistemas. No nos es ajeno en España esta lucha, precisamente cuando en el entorno de Doñana se pretende almacenar gas natural y ampliar una serie de gasoductos por una zona de gran valor ambiental.
El #NoDALP defiende los derechos de los pueblos indígenas y de los habitantes cercanos. Derechos que son ninguneados por las grandes corporaciones que arrasan nuestros derechos en todo el mundo.
A la vez se ha iniciado la acción judicial contra las compañías que están permitiendo esta obra, por crímenes contra la humanidad. Lo que está pasando en Dakota es una violación direta de la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas especialmente por el derecho a la información y consentimiento previo, la militariazción y el desarrolo de los procedimientos judiciales. El oleoducto se aprobó sin consultar a la comarca y sin el procedimiento ambiental adecuado. A través de Greenpeace puedes pedir al Presidente de Estados Unidos que paralice las obras en Dakota
Y como dice en su blog la activista índigena Krystal Two Bulls, que organiza el campamento en Standing Rock: si vives en este planeta, si respiras el mismo aire y bebes agua esta también es tu lucha. En Standing Rock se está elevando la responsabilidad de la lucha de todos los pueblos que deseamos transmitir un mundo mejor a las generaciones futuras.