Hay cuestiones que son absolutamente incomprensibles por la maraña jurídica que las rodea. Un caso que se estudiará en el futuro en las facultades de Derecho será el del hotel “El Algarrobico”, por ser un despropósito urbanístico que finalmente, tal y como declaró el Supremo en su última sentencia, es ilegal e ilegalizable.
Desde Greenpeace hemos intentado explicar la maraña jurídica en muchas ocasiones. Y en media docena de ocasiones hemos acudido al hotel, para evidenciar lo que para muchos de nosotros estaba claro. En la penúltima de las ocasiones, 100 activistas de nuestra organización pintaban un punto negro de 8.000 m2 en su fachada. Denunciábamos las estratagemas que amparaban a una empresa constructoras frente a la de defensa del medio ambiente que prima la Ley.
Hoy queda archivada la causa contra parte de esos 100 activistas, 28 concretamente que que se manifiestan contra este delito ambiental. El Juzgado de Instrucción de Vera (Almería) ha señalado en ese proceso penal lo siguiente:
“…dado que de las pruebas practicadas se infiere que la intencionalidad de los miembros de Greenpeace no era causar daños en el inmueble, siquiera de forma eventual sino la de protestar contra la construcción del mismo, construcción que ha sido declarada ilegal y que por tanto deberá ser demolida…”
En fin, la conclusión es clara: otro verano más que el hotel “El Algarrobico” permanecerá en pie a pesar de la existencia de veintidós sentencias desfavorables al mismo. Confiemos que desde este blog podamos algún día celebrar la ejecución efectiva de tanto pronunciamiento judicial y se culmine la demolición.
José Manuel Marraco Espinós , abogado de Greenpeace @JMMarraco