Comunicado de prensa - abril 15, 2016
• El proyecto, que cuenta con un amplio rechazo social, pone en peligro el alto valor ambiental y cultural de la zona y su producción agrícola y ganadera.
• Esta mina generaría un consumo de agua de medio millón de litros cúbicos al año en una zona con escasez y provocaría el vertido de aguas contaminadas.
Greenpeace ha presentado hoy alegaciones a la explotación de Tierras Raras que la empresa Quantum Minería S.L. pretende desarrollar en el Campo de Montiel (Ciudad Real). El alto valor ambiental y cultural de la zona, junto a la producción agrícola y ganadera de la que se alimenta una consolidada industria agroalimentaria hacen totalmente inviable esta actividad minera. Por eso, Greenpeace pide a la Junta de Castilla-La Mancha que descarte el proyecto.
Además, hay que sumar el amplio rechazo social mostrado al proyecto por los municipios de Valdepeñas, Cózar, Castellar de Santiago, Almedina, Torre de Juan Abad y Torrenueva. Todos ellos afectados por las 27.300 hectáreas solicitadas en los permisos de investigación y explotación minera.
Entre los principales valores ambientales amenazados por este proyecto destacan la presencia del águila imperial ibérica, que cuenta con planes de protección de la propia Junta, y el proyecto de reintroducción del lince Ibérico en el marco del LIFE IBERLINC. Además, este área es parte de un espacio protegido de la red Natura 2000 (ZEPA “Áreas de esteparias del Campo de Montiel”).
Otros aspectos negativos del proyecto minero, además de la extensión del terreno ocupado son el consumo de agua cuantificado en hasta 500.000 m3/año, en una zona con escasez e incluso cortes de agua a las poblaciones cercanas, las emisiones a las atmósfera de partículas procedentes del movimiento de tierras, acarreo de material, transporte y tratamiento del mineral en una planta de tratamiento, a lo que habría que sumar el vertidos de aguas contaminadas tras lavar el material.
“La Junta de Castilla la Mancha debe rechazar este proyecto minero debido a los gravísimos impactos tanto ambientales, sociales como culturales que conlleva”, ha declarado Julio Barea responsable de campaña de Greenpeace. “La Junta no puede poner en peligro el próspero desarrollo socio-económico del Campo de Montiel, conseguido con años de trabajo y conservación de su entorno y patrimonio cultural a causa de un proyecto minero privado”.
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