En una reunión celebrada el pasado miércoles en el Congreso de los Diputados con asociaciones de renovables y organizaciones ecologistas, los diferentes partidos políticos de ámbito estatal mostraron su apoyo al desarrollo de las energías renovables y manifestaron que lo incorporarán en sus programas cara a la cita electoral del 20 de diciembre. Era la primera vez que se celebraba una mesa-debate de este tipo sobre las energías renovables entre todos los partidos políticos y las organizaciones de renovables.
El objetivo de la reunión era que las asociaciones del sector conocieran de primera mano las posiciones de los diferentes grupos con respecto a la energía en general y a las energías renovables en particular. Los cuatro grandes temas planteados a las formaciones políticas fueron los siguientes: lucha contra el cambio climático; reforma energética y regulación renovable; fiscalidad medioambiental, autoconsumo y generación distribuida; y objetivos europeos a 2030 y la participación de las renovables en el mix de energía final.
Los partidos políticos participantes en la reunión fueron los siguientes: Ciudadanos, Equo, Izquierda Plural, Podemos, PP, PSOE y UPyD. Por parte de la sociedad civil, asistieron representantes de la Asociación Empresarial Eólica (AEE), la Asociación Nacional de Productores de Energía Fotovoltaica (ANPIER), la Asociación de Empresas de Energías Renovables (APPA), la Fundación Renovables, Greenpeace, la Asociación Española de la Industria Solar Termoeléctrica (Protermosolar), la Unión Española Fotovoltaica (UNEF) y WWF.
Todas las formaciones políticas manifestaron que sus grupos serán activos en la lucha contra el cambio climático a través de una mayor penetración de las energías renovables en el mix energético y el fomento de políticas de ahorro y eficiencia energética. Los partidos apostaron por un modelo energético bajo en carbono, que debería ser fruto de acuerdos, consensos o lo que casi todos denominaron un Pacto de Estado, que según la mayoría de las manifestaciones debería devolver la estabilidad y la seguridad jurídica a un sector que necesita planificación y objetivos a largo plazo para recuperar la confianza de los inversores.
Todos los partidos, excepto el PP, criticaron la reforma energética y manifestaron su apuesta por revertir la actual situación de las instalaciones y reparar los daños causados a las mismas aunque habría que estudiar cómo hacerlo pues algunos partidos ven complicado volver al escenario anterior a la reforma. Todos coincidieron en la necesidad de un marco regulatorio estable para el sector.
Los partidos participantes en la reunión se mostraron partidarios de establecer una fiscalidad medioambiental para favorecer la transición hacia una economía baja en carbono, basada en energías renovables.
En cuanto al nuevo Real Decreto sobre autoconsumo, todos los partidos, menos el del Gobierno, se mostraron partidarios de derogarlo como se habían comprometido en sede parlamentaria el pasado mes de julio y promulgar una nueva regulación del autoconsumo, que contemple entre otras disposiciones el balance neto. Por su parte, el representante del PP destacó como positivo el que su partido hubiera aprobado la legislación para desarrollar el autoconsumo.
Los partidos participantes en su totalidad se mostraron favorables a cumplir los objetivos europeos de renovables comprometidos por España a 2020 aunque algunos plantearon objetivos más ambiciosos, con porcentajes de renovables que podrían llegar al 70% en 2030 y al 100% en 2050. En líneas generales, la mayoría de los partidos políticos expusieron la necesidad de realizar una auditoría sobre los costes del sistema eléctrico y se mostraron partidarios de fomentar todos los usos de las energías renovables.
Por su parte, el PP justificó la reforma llevada a cabo ante la necesidad de acabar con el déficit de tarifa para que este no se convirtiera en déficit de Estado, algo que fue contestado por las organizaciones de renovables al señalar que el Gobierno se equivocó en el diagnóstico al culpar a las renovables del mismo y convertirlas en las grandes damnificadas de la reforma.