Comunicado de prensa - noviembre 12, 2013
Este mediodía ha llegado a la estación de Ladozhsky de San Petersburgo el tren en el que se ha trasladado a los 30 detenidos tras la protesta pacífica en la plataforma petrolífera de Gazprom en el Ártico. Los 30 del Ártico partieron de Murmansk en un vagón-prisión a primera hora del lunes. Al llegar a San Petersburgo el vagón fue separado y trasladado a un kilómetro de la estación. Las autoridades han trasladado a los detenidos en autobuses, rodeados de mucha policía.
No se conoce con seguridad a qué centro de detención van a ser trasladados y si este nuevo centro supondrá una mejora de sus condiciones, comparadas con la cárcel de Murmansk. También puede que los 28 activistas de Greenpeace y los dos periodistas independientes sean distribuidos en diferentes lugares de San Petersburgo. Greenpeace ya cuenta con un equipo legal y personal de apoyo en esta ciudad.
"Este es un nuevo capítulo en la historia de los 30 del Ártico, pero sigue siendo la misma historia. Son hombres y mujeres inocentes en la cárcel por cargos falsos, amenazados con largas penas de prisión por un crimen que no han cometido. En una era de gran cinismo y apatía política en muchos países, los activistas solo han hecho algo por lo que creen. Vieron que una plataforma petrolífera es una amenaza para el medio ambiente frágil y hermoso del Ártico. Protestaron de forma pacífica, impulsados por sus convicciones, y están siendo castigados injustamente. Deben ser liberados de inmediato", ha declarado Ben Ayliffe, portavoz de la campaña del Ártico de Greenpeace.
Después de un traslado entre prisiones, las autoridades rusas establecen un periodo cuarentena para los detenidos por la posibilidad de que existan enfermedades infecciosas. Esto puede ser por un tiempo relativamente corto, pero los abogados no tienen acceso a los detenidos durante este periodo.
El 24 de noviembre termina el periodo de detención de dos meses establecido por el Tribunal de Distrito de Leninsky de Murmansk. Si el Comité de Investigación ruso quiere extenderlo debe presentar una solicitud al tribunal de distrito competente en San Petersburgo, una semana antes de la fecha (el 17 de noviembre). Después de presentarse esa solicitud, se tendrían que establecer audiencias a los 30 detenidos que deben completarse antes del 24 de noviembre. Greenpeace espera que estas audiencias tengan lugar, de forma contínua durante la semana del 17 al 24 de noviembre. Siempre y cuando se prolongue el periodo de detención. El Comité de Investigación puede pedir un periodo máximo de investigacion de no más de cuatro meses, aunque en un principio, también podrían pedir menos tiempo.
Más de 50 días detenidos
El pasado 18 de septiembre, hace ya más de 50 días, 28 activistas de Greenpeace, un cámara y un fotógrafo independientes fueron detenidos cuando las fuerzas armadas rusas abordaron el barco de Greenpeace Arctic Sunrise mientras estaba en aguas internacionales. Aunque el objetivo de la protesta fue denunciar los planes de la empresa petrolífera Gazprom en el Ártico, los detenidos han sido acusados de vandalismo y los cargos de piratería aún no han sido retirados, lo que supone una mayor posibilidad de que los Arctic30 permanezcan en la cárcel entre 7 y 15 años.
Pero los 28 activistas de Greenpeace y el fotógrafo y cámara independientes no son ni vándalos ni piratas. Para Greenpeace, ambos cargos son completamente desproporcionados e infundados y la organización ecologista actuará de forma contundente para conseguir la puesta en libertad de los 30 activistas.
La corte regional de Murmansk ordenó prisión preventiva de dos meses, hasta al menos el 24 de noviembre, mientras se realiza la investigación. Las apelaciones para pedir la libertad bajo fianza fueron todas denegadas.
Desde la detención de los Arctic30, gran número de figuras internacionales, desde políticos a miembros de la sociedad civil, han mostrado su preocupación por los detenidos, entre ellas la presidenta de Brasil Dilma Rousseff, que pidió su liberación, o la canciller alemana Angela Merkel, que habló directamente con el presidente Putin. Además, 12 premios Nobel de la Paz mandaron cartas al presidente Putin pidiendo la inmediata excarcelación de los activistas. Personalidades de la cultura y del espectáculo también se han movilizado: Deepak Chopra, Gael García Bernal, Jude Law, Ewan McGregor, Jared Leto, Daniel Craig, Jim Carter, Edward Norton o Alejandro Sanz. Todos estos apoyos se suman a las más de dos millones de firmas que se han recogido hasta ahora.