Este sitio usa cookies. Si continúas navegando estás aceptando su utilización. Más información

La proposición no de ley del PP sobre chiringuitos confunde a la sociedad

La organización ecologista recuerda que la ley costas sí permite estos establecimientos y cree que la iniciativa solo pretende desgastar la imagen de la Ley de Costas

Comunicado de prensa - marzo 5, 2012
Greenpeace denuncia el intento del Partido Popular de confundir a la ciudadanía y desgastar la imagen de Ley de Costas con la proposición no de ley que presentará mañana en el Congreso. Según afirma el Grupo Parlamentario Popular, la propuesta que presentará mañana en la Comisión de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente pretende "arbitrar las medidas oportunas para mantener de forma sostenible y teniendo en cuenta los intereses de todos los ciudadanos, las terrazas de los restaurantes de las playas", aunque para Greenpeace, el único objetivo del partido en el Gobierno es el de allanar el camino hacia la reforma de la ley.

La organización ecologista recuerda que la Ley de Costas permite y garantiza la ubicación de chiringuitos en la costa, de forma que en el reglamento que regula la aplicación de esta ley solo se prohíbe que se invadan las playas, pero permite que se sitúen al borde de la arena y que no superen los 150 metros cuadrados de superficie ocupada.

Para Greenpeace, es incomprensible el desconocimiento que ha mostrado el grupo Popular al afirmar en la proposición que "la Ley de Costas crea incertidumbres sobre este tipo de establecimientos", ya que en Andalucía la gestión de los chiringuitos está transferida a la Junta y en la Comunidad Valenciana existe una comisión mixta Generalitat-Estado para ejecutar un traspaso de estas competencias, por lo que la aplicación de la Ley no supone ningún peligro para garantizar el desarrollo económico del sector.

Greenpeace recuerda que cada vez más el sector turístico demanda un esfuerzo para preservar el valor natural de las playas como consecuencia de las exigencias de los usuarios que huyen de la masificación que se sufren precisamente como consecuencia de una urbanización masiva y una pobre aplicación de la Ley de Costas.

"La Ley de Costas dispone una coexistencia más que razonable para que chiringuitos y playas convivan en armonía, además si se implementase una Gestión Integrada de Zonas Costeras a nivel estatal se podría avanzar, y solventar mucho de los problemas de nuestro litoral. Con este tipo de proposiciones de ley en el Congreso solo se persigue buscar un argumento electoralista", concluye Pilar Marcos, responsable de la campaña de costas de Greenpeace.

Categorías