Ghost Town (Ciudad Fantasma).
Al cumplirse 20 años de la catástrofe de Chernóbil Greenpeace viaja a Pripya en el corazón de la zona muerta
Imagen aérea de la central nuclear de Chernóbil
"El mundo científico ha demostrado que el OIEA ha tratado de
subestimar los impactos sobre la salud humana causados por la
catástrofe de Chernóbil. Greenpeace considera lamentable que el
afán del OIEA por beneficiar a la industria nuclear se haga a costa
del sufrimiento de millones de personas afectadas por la
radiactividad de Chernóbil", declaró Juan López de Uralde, director
ejecutivo de Greenpeace España.
Este informe de Greenpeace, que incluye diversos estudios,
además de información, en parte inédita, de otras investigaciones,
refleja que, a pesar de que permanezcan aún muchas incertidumbres
sobre las consecuencias completas del desastre de Chernóbil, los
datos que ya se conocen demuestran el alto coste para la vida
humana de ese accidente nuclear.
Un importante estudio (incluido en el informe), concluye que ya
se habrían producido 200.000 víctimas mortales por culpa de
Chernóbil en las tres repúblicas ex-soviéticas a causa de
Chernóbil. Según el informe, en los últimos 15 años se habrían
producido 60.000 muertes en Rusia atribuibles al accidente de
Chernóbil y se estima que el total de las pérdidas de vidas para
Ucrania y Bielorrusia podría alcanzar otras 140.000 (2).
Además, en un informe del Centro Independiente de Evaluación
Medio Ambiental de la Academia Rusa de la Ciencia, basado en datos
estadísticos del Centro Nacional de Estadística sobre el Cáncer de
Bielorrusia y Ucrania, prevé que se producirán próximamente otros
270.000 cánceres, de los cuales 93.000 mortales, causados por
Chernóbil en todo el mundo (3).
"El accidente de Chernóbil demostró la peligrosidad de la
energía nuclear y su potencialidad catastrófica para la salud
humana y el medio ambiente. No es posible plantear un nuevo modelo
energético que dé cabida a la energía nuclear, sin considerar
previamente en profundidad las consecuencias que todavía estamos
pagando por el accidente de Chernóbil", declaró Carlos Bravo,
responsable de la campaña de energía nuclear de Greenpeace
España.
El conjunto de datos incluidos en el informe proporciona una
amplia visión de la situación actual de los impactos sobre la salud
de Chernóbil y concluye que la radiación liberada por la catástrofe
ha tenido, además del impacto del cáncer, otros efectos
devastadores en la salud de los supervivientes: daños de los
sistemas inmunológico y endocrino, aceleración del envejecimiento,
trastornos cardiovasculares y del aparato circulatorio, trastornos
psicológicos, aberraciones cromosómicas y aumento de las
deformaciones en fetos y en niños.
Aparte del impacto directo de la radiación, la salud de la
población bielorrusa, ucraniana y rusa se ha visto seriamente
afectada por una serie de daños socio-económicos causados por la
pérdida de las áreas agrícolas, los realojamientos forzados de unas
350.000 personas, crisis económica y la falta de una adecuada
información a los afectados, además de un retraso político en la
protección de la víctimas.
Estos datos desafían las conclusiones del informe presentado por
el Chernóbil Forum del OEIA de septiembre de 2005 (4), que preveía
sólo 4.000 muertes adicionales atribuibles al accidente. Para
Greenpeace es evidente que las cifras del OIEA son "un menosprecio
al sufrimiento de cientos de miles de personas".
El OIEA omitió el hecho de que esos 4.000 casos mortales de
cáncer se referían sólo a un grupo específico estudiado de unas
600.000 personas (los llamados "liquidadores" y los realojados
después del accidente), mientras que la nube radiactiva provocada
por Chernóbil afectó a más de 2.000 millones de personas. Este
organismo enmascara además la verdadera escala de impacto a la
salud humana de Chernóbil en muchos otros aspectos. Por ejemplo, el
OIEA omitió todos los impactos no oncológicos del accidente e
intentó explicar muchos trastornos como "radiofobia", cuando
existen claras evidencias médicas de los impactos psicológicos de
la exposición a la radiación (por ejemplo, la glándula tiroides
tiene una relación directa con el bienestar psicológico).
"Resulta escandaloso comprobar cómo el OIEA está intentando
lavar la imagen de los impactos del accidente nuclear más grave de
toda la historia humana", ha añadido Carlos Bravo. "Negar las
reales implicaciones de Chernóbil no es solamente insultar a miles
de víctimas, sino que puede llevar a formular recomendaciones
peligrosas como, por ejemplo, proponer realojar muchas personas en
áreas contaminadas. El OIEA no puede seguir siendo el organismo de
control de la energía nuclear cuando ni siquiera se atreve a
admitir la responsabilidad de esta energía ante aquellos que por su
culpa han visto sus vidas destrozadas para siempre", añadió
Bravo.
Exposición en España "20 años después"
El informe de Greenpeace "La catástrofe de Chernóbil.
Consecuencias en la salud humana" se ha publicado a la vez que en
30 ciudades en todo el mundo, al igual que la exposición
fotográfica "20 años después" del premiado con la World Press
Photo, Robert Knoth (5). La exposición se compone de fotos de
individuos y familias afectadas contando sus historias de lucha por
la vida a causa de Chernóbil y de otros desastres nucleares. La
inauguración se ha realizado hoy en la FNAC de Plaza Norte de
Madrid e itinerará por distintas ciudades españolas a lo largo de
este año.
"Estas imágenes son un recordatorio de que las vidas humanas son
más que números. Detrás de las estadísticas hay personas que están
pagando el enorme precio de este accidente. Cada persona que
todavía tenga dudas sobre los peligros que la energía nuclear
supone debería visitar esta exposición y ver con sus propios ojos
una de las razones por las cuales nos oponemos a la energía
nuclear. Veinte años han pasado y la amenaza de un nuevo Chernóbil
yace detrás de cada central nuclear " concluye Carlos Bravo.
DATOS DEL INFORME
- La incidencia del cáncer ha aumentado en Rusia, Ucraina y
Bielorrusia. Entre 1990 y 2000 se documentó un incremento del 40%
de todos los cánceres en Bielorrusia, con aumentos más altos (52%)
en la región altamente contaminada de Gomel. En Ucrania se vio un
aumento del 12% y en áreas contaminadas de la región de Zhytomir en
Ucrania, el número de adultos con cáncer aumentó casi tres veces
entre 1986 y 1994. En la región rusa de Bryansk, la incidencia del
cáncer aumentó 2.7 veces.
- Sólo en Bielorrusia, se han identificado unos 7.000 casos de
cáncer de tiroides debidos al accidente hasta 2004. Un estudio
reciente ha alarmado de que el cáncer de tiroides en niños ha
aumentado 88.5 veces, en adolescentes 12.9 veces y en adultos 4.6
veces. La previsiones para Bielorrusia hablan de entre 14.000 y
31.400 casos extra de cáncer en 70 años.
- Por lo que tiene que ver con Ucrania en su totalidad, se prevén
unos 24.000 cánceres de tiroides, de los cuales 2.400
mortales.
- Este dramático aumento de los casos de cáncer de tiroides son
muy superiores a lo esperado. Justo después del accidente, se
predijo que se produciría sólo un ligero aumento de los casos de
cáncer. Además estos cánceres han demostrado ser muy agresivos, con
un periodo de latencia muy breve y una elevada tendencia a formar
metástasis en un 50% de los pacientes. Este último factor obliga a
tratamiento quirúrgicos repetidos para remover las metástasis
residuales.
- La leucemia empezó a aumentar significativamente en las
poblaciones más expuestas unos 5 años después del accidente. Se ha
estimado que la población bielorrusa podría llegar a sufrir hasta
2.800 casos extra de leucemia entre 1986 y 2056. De estos, hasta
1.880 serían mortales.
- Desde 1995 en adelante se ha detectado también un aumento de
los casos de cáncer de estómago, pulmones, mama, recto, colon,
tiroides, médula ósea y del sistema linfático. Entre 1987 y 1999,
se registraron aproximadamente 26.000 casos de cánceres inducidos
por la radiación en Bielorrusia. De estos casos, el 18.7% eran
cánceres de piel, el 10.5% cánceres de pulmón y el 9.5% de
estómago.
- Los trastornos cardiovasculares y del sistema linfático han
aumentado considerablemente en Bielorrusia, Ucrania y Rusia. En
Bielorrusia, las enfermedades relacionadas con la circulación de la
sangre se han visto multiplicadas por 5.5, diez años después de
accidente. En Ucrania, los trastornos emáticos y cardiovasculares
aumentaron de un factor 10.8-15.4 entre los habitantes de las áreas
contaminadas.
- Impactos de la radiación sobre el aparato reproductor. La
acumulación de radionucleidos en el cuerpo de la mujer lleva a un
aumento de la producción de la hormona masculina testosterona, que
causa la aparición de atributos masculinos. En cambio, se hizo
mucho más frecuente la impotencia entre los hombre de entre 25 y 30
años que viven en las regiones contaminadas por radiactividad. Los
niños de los territorios contaminados sufren un retardo del
desarrollo sexual. Las madres padecen de trastornos del ciclo
menstrual y de una mayor frecuencia de problemas ginecológicos,
anemia durante y después del parto, anomalías en el parto y ruptura
prematura de las aguas.
- El accidente de Chernóbil trastocó el equilibrio de toda la
sociedad bielorrusa, ucraniana y rusa. Se ha generado una crisis
general a causa de un complejo entramado de distintos factores
como, por ejemplo: realojamiento de poblaciones muy numerosas,
pérdida de los terrenos agrícolas, contaminación de los alimentos,
crisis económico, incremento del gasto sanitario a causa de los
problemas generados por el accidente, problemas políticos, mano de
obra debilitada, enormes costes estatales para la recuperación de
la normalidad en las zonas afectadas, etc.
NOTAS
(1)El informe "La catástrofe de Chernóbil. Consecuencias en la
salud humana" se puede descargar en:
www.greenpeace.org/chernobylhealthconsequncesreport.pdf En
español, está disponible el
Resumen Ejecutivo de este informe
(2) Khudoley et al. (2006) Attempt of estimation of the
consequences of Chernobyl Catastrophe for population living at the
radiation-polluted territories of Russia. Publ: Centre of the
Independent Environment Assessment of the Russia Academy of
Sciences, Consequences of the Chernobyl Accident: Estimation and
prognosis of additional mortality and cancer deseases. ISBN
5-94442-011-1.
(3) Malko M.V. (2006). In: Estimations of the Chernobyl
Catastrophe (on the base of statistical data from Belarus and
Ukraine), Publ: Centre of the Independent Environment Assessment of
the Russia Academy of Sciences, ISBN 5-94442-011-1
(4) El informe del Chernóbil Forum de la OIEA: http://www.iaea.org/NewsCenter/Focus/Chernobyl/index.html
(5) En Madrid en FNAC de Plaza Norte en San Sebastián de Los
Reyes. Se puede consultar una lista completa de los sitios de la
exposición en: www.greenpeace.org/exhibition