Comunicado de prensa - septiembre 28, 2007
El presidente George W. Bush ha convocado hoy en Washington a los países más contaminadores del mundo para no ofrecer absolutamente nada nuevo que ayude a resolver el problema del cambio climático. De su discurso se desprende que el presidente de los Estados Unidos sigue pensando que basta con cruzar los dedos y esperar que la tecnología nos salve.
Imagen de la actividad El Túnel del Tiempo de Greenpeace. ¿Puedes imaginarte como será el 2050? ¿te gustaría saber cómo sería el futuro dependiendo de las decisiones que tomes en este momento? ¿quieres viajar al 2050? Ahora con Greenpece puedes hacerlo.
Pero la realidad es muy distinta; necesitamos reducciones
obligatorias de emisiones y las necesitamos ya. Con su continuo
llamamiento a "un nuevo enfoque internacional", Bush ha roto hoy la
promesa que hizo al G8 de no establecer un proceso apartado del
Protocolo de Kioto.
"El tiempo se le acaba a este presidente, y a este planeta", ha
declarado en Washington Daniel Mittler, portavoz de Greenpeace
Internacional. "Ante sucesos recientes como el récord de fusión de
hielo ártico este año, los científicos nos dicen que es hora de
actuar para frenar el cambio climático, comenzando a reducir las
emisiones mundiales antes de 2015, dentro del Protocolo de Kioto."
Los países que asisten a la reunión de Washington han sido lo
bastante amables como para escuchar las palabras vacías de Bush.
Pero deben dejar claro que Kioto es el único camino. No necesitamos
otra cumbre en Washington el año que viene. Bush está simplemente
tratando de despejar las críticas hasta que deje su puesto, y como
resultado está defraudando al mundo sobre el cambio climático.
El presidente de los Estados Unidos ha pedido un Fondo de
Tecnología Limpia, pero no se trata sino de otra distracción. De
hecho, necesitamos una revolución de energía limpia en los países
en desarrollo y Kioto es el camino para lograrla. Seguir confiando
en la fuente de energía más sucia de todas, el carbón, y en la
peligrosa energía nuclear es un craso error. "Bush da la bienvenida
al Protocolo de Montreal, un acuerdo internacional obligatorio, y
nos preguntamos por qué no comprende que el Protocolo de Kioto
haría por el clima lo mismo que el de Montreal está haciendo para
evitar la destrucción del ozono", ha añadido el portavoz de
Greenpeace. "La aparente preocupación de Bush por la protección de
los bosques es de risa, mientras no acepte que ésto también debería
tratarse dentro de Kioto."