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La Unión Europea apoya en Bangkok la tala industrial como forma de combatir el cambio climático

Greenpeace reclama la protección de los bosques primarios y la lucha contra la deforestación para frenar la crisis climática

Comunicado de prensa - octubre 7, 2009
Greenpeace ha denunciado hoy en Bangkok, Tailandia, durante la reunión de la ONU preparatoria de la cumbre climática de Copenhague, que los países europeos podrían llegar a financiar con sus donaciones a la industria maderera, con lo que apoyarían implícitamente la degradación de los bosques y minarían los esfuerzos globales para combatir el cambio climático.

La mayor parte del bosque primario ha desaparecido y el futuro para las especies y pueblos que viven en él es incierto

Esta situación podría darse si prospera la postura europea en el debate actual sobre los detalles del acuerdo de REDD (Reducción de las Emisiones procedentes de la Deforestación y la Degradación Forestal) y en especial sobre el significado y alcance de la terminología utilizada para la gestión forestal sostenible (Sustainable Management of Forest o SMF) y la conversión de los bosques en otros usos.

En los acuerdos internacionales sobre cambio climático alcanzados en Bali 2007 y Poznan en 2008 los documentos consensuados hacen referencia a cómo deberían tratarse los bosques en el futuro mecanismo REDD, utilizándose el término de "gestión sostenible de los bosques" como una definición amplia que incluye temas como el uso y conservación de los bosques por parte de las comunidades locales, actividad que no incluye necesariamente la actividad industrial a gran escala.

Sin embargo, desde entonces, el sector forestal ha presionado para cambiar este concepto por otro que, aunque parece el mismo, tiene un significado diferente. Sustainable Forest Management o SFM es un término que pertenece al lenguaje del sector maderero industrial y que da por sentado que los bosques han de ser explotados industrialmente (1).

"Las consecuencias de estos cambios pueden ser desastrosas. En lugar de detener la deforestación y proteger los bosques para salvar el clima, el sector forestal parece querer utilizar este acuerdo internacional para legitimar sus actividades o fomentar las plantaciones", ha señalado Grant Rosoman, responsable de la campaña de Bosques de Greenpeace Internacional y coautor del informe Why Logging Will Not Save the Climate. (2)

Las grandes extensiones de bosque intacto que quedan todavía en el planeta -los bosques primarios- siguen almacenando carbono, por lo que es vital que se frene su degradación y deforestación para frenar el cambio climático. Globalmente, la deforestación representa casi el 20% de los gases de efecto invernadero.

Greenpeace demanda que en la Cumbre de Copenhague se fije el objetivo de acabar con la deforestación tropical para el 2020. El cambio climático y la deforestación forman parte de un círculo vicioso y solo la deforestación cero puede incrementar la resistencia de los bosques al cambio climático.

"Si la Unión Europea sigue por este camino no resolveremos la verdadera prioridad que es detener la deforestación tropical. Estaremos acelerando el cambio climático"  ha declarado Miguel Ángel Soto, responsable de la campaña de Bosques y Clima de Greenpeace España "Los gobiernos podrían llegar a utilizar los fondos para la protección de los bosques para financiar la destrucción de los mismos y acelerar el cambio climático".

En España, el Gobierno se ha alineado con las tesis de incluir actividades como la gestión forestal, la promoción de plantaciones forestales o el consumo de productos forestales dentro de un futuro esquema REDD. Desde el sector forestal se están lanzado mensajes faltos de rigor científico, tales como "España es el país de Europa con mayor incremento de superficie de bosque", "la superficie forestal española tiene la capacidad de absorber el 20% de las emisiones de gases de efecto invernadero que emite anualmente España" o que "los productos forestales, el papel y la madera, son sumideros de CO2".

"Existen numerosas incertidumbres y dudas metodológicas sobre la manera de contabilizar la cantidad de carbono que absorben los ecosistemas forestales, el efecto de la gestión forestal sobre la fijación de CO2 o el efecto sumidero de los productos forestales", ha apuntado Soton "Pero más allá de la falta de rigor de una parte del sector forestal, el cocinado e inflado de las estadísticas sobre la fijación de CO2 en los montes españoles hace un flaco favor a la lucha contra el cambio climático y a la pervivencia de los bosques".

Notas:

(1)Un estudio realizado por la Organización Internacional de Madera Tropical (ITTO, en sus siglas en inglés) encontró que las reducciones potenciales de emisión de SFM eran un sólo el 3% de la mitigación potencial de REDD y la restauración de bosques-

(2)Para descarga: http://www.greenpeace.org/international/press/reports/why-logging-will-not-save-the