Este sitio usa cookies. Si continúas navegando estás aceptando su utilización. Más información

La energía nuclear recibió 40 veces más ayuda pública que la energía eólica

Comunicado de prensa - agosto 9, 2004
Según un informe de la Agencia Europea del Medio Ambiente, los costes externos provocados por los combustibles fósiles y la energía nuclear ascendieron a 70.000 millones de euros anuales sólo en generación de electricidad

Activistas de Greenpeace elevan un globo aerostático demandando el cierre de la central nuclear de Garoña

Según un reciente informe de la Agencia Europea del Medio Ambiente (AEMA) sobre subsidios públicos al sector de la energía (ver nota al fin de comunicado), la industria nuclear en EE.UU. recibió un apoyo económico 40 veces superior que la energía eólica en los primeros momentos de su desarrollo. Así pues, la industria nuclear recibió 39.000 millones de dólares en subvenciones desde 1947 a 1961 mientras que la energía eólica en un período similar (1975-1989) no recibió ni 1.000 millones.

"A pesar del desproporcionado y masivo apoyo con fondos públicos a la industria nuclear, hace más de 30 años que no hay nuevos encargos de centrales nucleares en Estados Unidos, país pionero de la tecnología nuclear, lo que demuestra el fracaso económico de esta fuente de energía" ha declarado Carlos Bravo, responsable de la campaña nuclear de Greenpeace.

Para Greenpeace, el ejemplo de Estados Unidos no es un caso aislado, sino que indefectiblemente se ha repetido en el resto del mundo. La energía nuclear sólo ha podido sobrevivir en países donde ha contado con importantes subsidios públicos, y aún en éstos países, a pesar de haber recibido una cantidad ingente de ayudas públicas directas e indirectas (como no hacer frente a los gastos de gestión de los residuos radiactivos), la energía nuclear no ha resultado ser competitiva económicamente.

Este mismo informe señala que las energías renovables recibieron apenas 5.000 millones de euros de ayudas en Europa en 2001 mientras que las energías sucias (carbón, petróleo, gas y energía nuclear) recibieron casi 24.000 millones, sin contar los costes externos que la producción y uso de estas energías sucias ocasiona. La industria nuclear se ve además favorecida al no obligársele a disponer de un seguro de responsabilidad adecuado en caso de accidente nuclear, lo que supone un importante subsidio indirecto.

Estos costes externos provocados por las energías sucias en generación de electricidad ascienden a más de 70.000 millones de euros mientras que estos costes para las energías renovables son sólo de 3.000 millones.

"Es un suicidio medioambiental, social y económico mantener ayudas directas o indirectas, a fuentes de energía tan contaminantes y peligrosas como los combustibles fósiles y la energía nuclear que provocan unos costes externos hasta 23 veces superior a las energías renovables" -añadió Emilio Rull, responsable de la campaña de energía de Greenpeace- "Si queremos cumplir con nuestras obligaciones internacionales establecidas en Kioto para luchar contra el cambio climático y evitar los peligros de la energía nuclear, es necesario centrar todos nuestros esfuerzos políticos y financieros en energías renovables, ahorro y eficiencia energética".

¡Hazte Socio de Greenpeace!

Greenpeace es una organización independiente, que no acepta donaciones ni presiones de gobiernos, partidos políticos o empresas y cuya actividad depende exclusivamente de las aportaciones voluntarias de socios y simpatizantes. Si quieres ayudar a Greenpeace, hazte socio ahora