Este sitio usa cookies. Si continúas navegando estás aceptando su utilización. Más información

Islandia congela la protección de las profundidades marinas en la ONU

Greenpeace denuncia la anteposición de los intereses pesqueros al consenso de la comunidad científica marina y organizaciones conservacionistas.

Comunicado de prensa - noviembre 23, 2006
La negociación en el seno de Naciones Unidas para la adopción de una posible moratoria sobre la pesca de arrastre de profundidad no ha salido finalmente adelante tras el bloqueo ejercido por un pequeño grupo de influyentes naciones con intereses pesqueros encabezados por Islandia, que han antepuesto los intereses de sus flotas pesqueras al consenso de la comunidad científica marina y los conservacionistas.

Hombre descuartizando una ballena en Islandia.

"El acuerdo final está lleno de lagunas, no se ha avanzado nada en la protección de los océanos" declaró Karen Sack, Consejera Política de Océanos de Greenpeace Internacional, que ha estado siguiendo las negociaciones en Naciones Unidas.

"La comunidad internacional debería estar indignada con la postura de Islandia, que casi sin ayuda podría hundir todos los intentos de protección en alta mar y acabar con la seguridad alimentaria de las generaciones futuras. Islandia debería sentirse abochornada por haber hundido las esperanzas de lo que debería haber sido un cambio más que necesario en la política internacional sobre los océanos." añadió Sack.

Mientras países como Australia, Nueva Zelanda, las Islas del Pacífico, Estados Unidos, Brasil, India, Sudáfrica, Chile, Alemania e incluso la Unión Europea y Canadá apoyaron una acción decidida en Naciones Unidas, la toma de decisión por consenso de todos los estados presentes ha supuesto finalmente en un resultado terriblemente débil.

Nuevas evidencias científicas demuestran que para 2048, es probable que la mayor parte de las pesquerías comerciales se hayan colapsado (1). Además, los nuevos datos económicos indican que la flota de arrastre de profundidad no es rentable sin los sustanciosos subsidios que recibe (2).

"El reducido grupo de países que se oponen a la moratoria de Naciones Unidas debe darse cuenta de que están actuando en contra de su propia industria y que no pueden continuar por este camino. Es necesario un cambio radical para proteger los océanos." añadió Sack

Greenpeace considera que los países comprometidos con la moratoria tienen ahora la oportunidad de seguir luchando para proteger los hábitats vulnerables de las prácticas de pesca destructiva, limitando el acceso a sus mercados del pescado proveniente del arrastre de profundidad y presionando para el establecimiento de una red de reservas marinas global.

- NOTAS:

(1) Worm et al. 2006. Impacts of Biodiversity Loss on Ocean Ecosystem Services. Science vol. 314. 3 de noviembre de 2006

(2) Assoc. Prof. Rashid Sumalia, autor principal del estudio Catching More Bait: A

Bottom-up Re-estimation of Global Fisheries Subsidies (disponsible en pdf, ver Capítulo 3.)